Shatat, figura clave en el juicio

Uno de los testimonios claves en el juicio celebrado este jueves en el juzgado de primera instancia número 12 de Málaga era el de Moayad Shatat, en su día vicepresidente ejecutivo del club, hombre de confianza del jeque y con poderes concedidos por el propietario para la toma de decisiones dentro de la entidad. Un eslabón más que relevante en esta cadena de acusaciones que demandante y demandado llevan cruzando ante el juez desde 2015.

Shatat reconoció haber firmado el acuerdo de intenciones que recogía todos los detalles de la compraventa del 49 por ciento de las acciones del jeque. Aunque dejó en el aire la cuestión sobre si el jeque estaba informado o no de dicho acuerdo. "Hubo problemas con pagos a los jugadores y Hacienda y UEFA nos estaba presionando para que vendiéramos a algunos jugadores. Estuvimos trabajando en el club con el equipo que existía y dábamos la bienvenida a cualquier persona que pudiera ayudar. Jamal Satli Iglesias estaba entre esas personas. Venía a darnos asesoramiento. Él y su equipo entraron para ayudarnos a sobrevivir. En ese equipo estaba el señor Gonzalo Hervás”, explicó.

En referencia a Hervás, admitió que BlueBay sí formó parte del día a día del club durante una etapa: “Venía al club y nos ayudaba. Se reunió con nosotros a principios de 2013. Hubo una época de dificultades económicas, mucha diferencia entre ingresos y gastos. El club estaba en una situación de insolvencia”. La hotelera entró para ayudar "en la gestión y en la financiación".

Moayad Shatat también declaró ante el juez que Hervás participó en alguna reunión con la Agencia Tributaria en Sevilla para tratar de renegociar la deuda que mantenía el club con Hacienda. Las reuniones con la administración posibilitaron un acuerdo en el que el futuro traspaso de Isco (meses después vendido al Real Madrid por 27 millones de euros más tres en variables) y los derechos de televisión quedaron como garantías.