La sangría aún escuece en el Málaga
La sangría del colegiado De la Fuente Ramos aún escuece en el seno del Málaga. Mientras los responsables jurídicos le dan forma a las alegaciones, muy complicadas en el caso de los expulsados tras la redacción del acta, en el vestuario y en la propiedad siguen bastante enfadados con el arbitraje del joven colegiado castellano-leonés.
El más vehemente fue el delegado del primer equipo, Josemi, experto en partidos de este tipo y que tuvo que apagar más de un fuego en los momentos de máximo fragor (sobre todo tras la expulsión de N’Diaye). Camino de regreso en el AVE (el Málaga durmió en Zaragoza y volvió en tren esta mañana), Josemi escribió en su perfil de la red social Twitter: “Triste por la derrota... Ya en frío, los que en su día hemos jugado en El Sadar, sabemos que la presión y ambiente de la gente hace que los árbitros beneficien al equipo local, pero que mi equipo reciba 9 amarillas y 2 rojas sin pegar una puta patada es vergonzoso!!”.
Triste por la derrota... Ya en frio,los q en su dia hemos jugado en el Sadar, sabemos q la presion y Ambiente de la gente hace q los árbitros beneficien al equipo local, pero que mi equipo reciba 9? y 2? sin pegar una puta patada es Vergonzoso!!
— Josemi (@JosemiFutlbol) 4 de noviembre de 2018
El presidente del club, Abdullah Al-Thani, por su parte, también empleó las redes sociales para decirle "ciego" al árbitro del partido con varios tuits y montajes simulando la invidencia de un colegiado.
referee of the match blind
árbitro del partido ciego
حكم المباراة اعمى @rfef ✊?✊?✊?✊?✊?@LaLiga @LaLigaEN @LaLigaArab #Respeto #respect #احترام#Málagacf @MalagaCF @MalagaCF_en @MalagaCF_ar pic.twitter.com/v3K1fTlZxW— Abdullah N Al Thani (@ANAALThani) 4 de noviembre de 2018
Más comedido estuvo Cifu. El lateral blanquiazul, aún lesionado, fue de los pocos que se manifestó tras el encuentro con el siguiente tuit:
Caer para levantarse, está permitido caer pero obligatorio levantarse, a seguir por el camino que nunca es fácil! ??vamos para arriba!! ???⚪️?
— Miguel Cifuentes (@cifuma) 3 de noviembre de 2018