Con uno basta
Se sabía que esta temporada en LaLiga 1|2|3 se iba a sufrir. Pero el Málaga, a pesar de sumar seis victorias en siete encuentros disputados, cinco de ellos los ha logrado ganar por la mínima, remontando en la primera jornada en Lugo y, en los otros cuatros, marcando un único gol y logrando mantener su puerta a cero. Principalmente en La Rosaleda ha sido muy clara la tendencia del equipo malaguista. En los cuatro encuentros disputados ante su afición, el Málaga ha logrado no encajar ningún gol. Ni Alcorcón, ni Tenerife, ni Córdoba, ni Rayo Majadahonda consiguieron estrenar el marcador visitante del electrónico del feudo malagueño.
Pero sólo en el derbi andaluz ante el Córdoba el Málaga se dio un festín goleador, anotando tres tantos y desatando la algarabía en la grada, que viendo la victoria asegurada se pasó de fiesta toda la segunda parte. Distinto fue el nudo de la historia en los otros choques donde, con un sólo gol anotado en el casillero malaguista, la incertidumbre por la posibilidad de que se esfumasen los tres puntos hacía crecer la tensión en la grada.
El Málaga vive en el alambre en estos partidos con resultados tan cortos. Antológica fue la parada de Munir en Almería en el descuento, con un pie milagroso que salvó el empate cuando el partido languidecía. En la Rosaleda se han vivido tres partidos que acabaron 1-0, aunque el sufrimiento ante el Alcorcón fue el de no conseguir abrir la lata hasta el minuto 82. Posteriormente, tras el gol de Blanco Leschuk, el equipo de Muñiz supo aguantar bien la situación.
Diferentes fueron las sensaciones ante Tenerife y Rayo Majadahonda. Tras un buen inicio ante ambos conjuntos, el Málaga logró adelantarse en el primer tiempo e irse ya al descanso en ventaja. Durante el segundo tiempo, el conjunto blanquiazul nadó y guardó la ropa, lo que le hizo echarse unos metros atrás y ver como el equipo rival tenía opciones de empatar, llegando incluso los tinerfeños a estrellar un disparo a la madera en los minutos finales. Hasta el momento, un gol ha bastado para sumar cuatro victorias. Pero el Málaga debe de buscar más ese segundo tanto que le permita vivir con mayor tranquilidad los últimos minutos de los partidos y evitarse riesgos innecesarios.