La dramática y turbulenta historia que Lestienne tiene detrás

El fichaje de Lestienne ha sorprendido a todos. El jugador belga de 25 años llega libre al Málaga hasta final de temporada procedente del Rubin Kazan, que en 2016 pagó diez millones de euros por él. El nombre resultará desconocido a muchos, pero el todavía joven extremo fue una de las grandes promesas del fútbol belga y llegó a despuntar de manera notable en la Champions con el PSV. Un zurdo cargado de talento que tiene detrás una historia tan dramática como turbulenta. 

El primer asunto extradeportivo que trascendió fue en 2013. Una noche antes de un partido con la sub 20 de Bélgica, Lestienne fue pillado en su habitación con una chica y la Federación le sancionó con seis meses sin poder entrar en ninguna convocatoria ni de la absoluta ni de las categorías inferiores. Después de aquello, en 2014, fichó por el Al Arabi de Catar y se le perdió un poco la pista en Europa. 
Sin embargo, en Asia no le fueron bien las cosas y regresó al viejo continente por dos veces en sendas cesiones, primero al Genoa y después al PSV. En Eindhoben fue donde se volvió a ver a ese jugador desequilibrante. El belga recuperó su mejor nivel y brilló hasta en la Champions League, marcando al Manchester United y al CSKA. Sin embargo, ese año 2015 acabó siendo dramático para Lestienne. En apenas dos meses, el flamante fichaje malaguista perdió a su madre y a su padre, y desde entonces no ha sido el mismo. 
Después de todo eso ha vuelto a protagonizar dos altercados más. Durante su etapa en Holanda, el belga fue arrestado por la Policía tras verse involucrado en una pelea junto a otro jugador del PSV, Jeroen Zoet (vídeo superior). Lo último fue hace unos meses en el Rubin Kazan. Varios compañeros se quejaron de su falta de actitud tanto en los entrenamientos como en los partidos y se llegó a hablar de la posibilidad de que lo bajaran al filial por actos de indisciplina.