Efectividad, iniciativa y tablas en Ipurúa

Éibar y Levante firmaron las tablas en un partido emocionante, en el que ambos quisieron buscar la portería contraria, pero que deja mejor colocados a los levantinistas, si bien los armeros volvieron a sumar y a marcar, por lo que el resultado no terminó de desagradar a ninguno de los dos equipos.

El conjunto armero comenzó apretando fuerte, y ya avisó de sus intenciones en el primer minuto con un remate alto de Oliveira a la salida de un córner. Y no parecía ser un espejismo, ya que los locales acorralaron al Levante en su área en los primeros compases del encuentro, y recordaron al equipo de la pasada temporada, si bien no eran capaces de poner en serios aprietos a Raúl.
Escalante lo intentó desde lejos en el ecuador de la primera mitad, aunque su disparo se marchó alto, mientras los levantinistas seguían sin encontrar su juego. Un par de acciones de Morales fueron las únicas que inquietaron a la zaga armera, pese a lo cual los de Mendilibar seguían buscando la portería contraria con mucho ahínco, pero sin fortuna.
Y cuando más lo estaba mereciendo el Éibar, apareció Morales, para aprovechar un balón en profundidad y batir a Dmitrovic en el único disparo entre los tres palos de los visitantes, gol que no celebró por su pasado armero pero que hacía mucho daño a un conjunto local que no se merecía tal castigo.
Por si fuera poco, Morales volvió a inventarse una jugada por la banda derecha para ceder el segundo a Bardhi, y hundir la maltrecha moral armera. El Éibar siguió intentándolo hasta el descanso, pero la losa del marcador era demasiado pesada.
En la reanudación tanto el público como los jugadores parecían haberse enfriado tras el mazazo de la primera mitad, pero Arbilla despertó a público y equipo con un imparable golazo de falta directa que dejaba el partido muy abierto.
El cuarto gol en toda la temporada pareció espolear a los locales, y Mendilibar optó por dar la oportunidad a Charles. El Levante se aferraba al resultado, mientras aguantaba las acometidas armeras, esperando su posibilidad de sentenciar el partido al contragolpe.
El Éibar quería, pero no podía, hasta que una jugada de un sensacional Inui, mejor jugador del encuentro, rematada por Charles devolvió las tablas al marcador a falta de un cuarto de hora para el término del partido, con lo que las espadas volvían a estar en todo lo alto.
Tras lograr lo que esta temporada parecía imposible, remontar dos goles en contra, el Éibar se fue a por la victoria. Sergi Enrich tuvo el gol a falta de cuatro minutos para el final, pero Raúl estuvo ágil para evitar el tercer tanto armero. No cejaron en su empeño los de Mendilibar, pero el marcador no se movió más y ambos equipos se llevaron un punto merecido que les ayuda en sus aspiraciones por mantenerse en Primera División.