Después de más de dos años lejos de su estadio, el FC Barcelona está cada vez más cerca de regresar al Spotify Camp Nou. El próximo 10 de agosto, con motivo del Trofeo Joan Gamper, la afición culé volverá a disfrutar del fútbol en su templo. Pero antes, el club está llevando a cabo una serie de pruebas para asegurarse de que todo funcione como debe en esta reapertura parcial.
Este lunes 28 de julio se ha realizado un test técnico y operativo en las zonas de Tribuna y Gol Sur del estadio. ¿El objetivo? Comprobar que las principales instalaciones están listas para recibir de nuevo al público. Se trata de una acción clave dentro del proceso de puesta a punto, y uno de los últimos pasos antes del esperado regreso a casa.
Durante esta jornada de pruebas se han ensayado los sistemas fundamentales que garantizan el correcto funcionamiento del estadio durante un partido. Desde la iluminación ambiental y deportiva, hasta la megafonía, las alarmas, la señalización, la accesibilidad o las salidas de emergencia.
También se han revisado los sistemas contra incendios y se ha evaluado la operativa habitual con la implicación de diferentes áreas del club como Seguridad, Operaciones, Mantenimiento, Instalaciones, IT y restauración, junto a empresas externas, como ha informado el club en su página web oficial con un largo comunicado.
Este ensayo es clave para detectar y corregir posibles errores técnicos u operativos antes del día del partido. Aunque las obras del Espai Barça aún no han finalizado, el club quiere que esta vuelta sea lo más segura y cómoda posible para los socios, socias y aficionados que acudan a vivir el reencuentro.
Todavía quedan zonas por completar, como la nueva tercera grada, el doble anillo VIP, la cubierta del estadio o la urbanización del entorno. Por eso, la reapertura será parcial y se convivirá con los trabajos en curso. Aun así, el Barça está trabajando para minimizar las molestias y ofrecer la mejor experiencia posible desde el primer día.