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De Segunda a Europa, un "sueño" que ya logró Fernando Vázquez con el Celta en 2006

Miguel Delgado

La meta de Fernando Vázquez en el Deportivo no atiende a escépticos. Con paciencia, asegurando en primer lugar la continuidad del equipo en LaLiga SmartBank, el 'profe' desveló el sueño que quiere compartir con el resto de aficionados de Riazor: devolver al equipo a Primera División... y a Europa.

Especialista en la categoría de plata, el bagaje de Fernando Vázquez entrenando a equipos de diversa índole es extremadamente variopinto. Tras una primera toma de contacto en la escuela de fútbol de Lalín, en Pontevedra, el profesor de inglés nacido en Castrofeito arrancó una andadura en el fútbol español que aún sorprende.

Racing de Ferrol, Lugo, Compostela en Primera División, Real Oviedo, Mallorca, Real Betis, hasta llegar al Celta de Vigo: parada especial la de Balaídos. No cabe duda de la especialidad del propio Vázquez en afrontar situaciones de riesgo, en algunas ocasiones por su difícil relación con directivos de 'alto standing' -como Caneda o Lopera-, pero su admiración por el tipo de fútbol de Arrigo Sacchi le hizo ganarse un sitio entre las agendas más destacadas del panorama nacional.

Fernando Vázquez, antes del Dépor-Cádiz (Foto: Iris Miquel).

Tras la debacle, fichaje de Fernando Vázquez en 2004

Después de una época dorada en Vigo, Vázquez aterriza en Balaídos en 2004, ya consumado el descenso de categoría y con la necesidad de volver a Primera división. El sobrecoste económico obligó a desprenderse de estrellas consolidadas en la ría, tales como Mostovoi, Luccin, Sylvinho o Edu, si bien otros, como Gustavo López, decidieron ayudar al equipo volver.

Dicho y hecho. El susto por la alineación indebida de Toni Moral aplazó la celebración del ascenso hasta la última jornada, cuando el cuadro vigués venció al Lleida por 0-2 gracias a los tantos de Jandro y Jesús Perea. El 18 de junio de 2005 el Celta, segundo clasificado, volvía a Primera División.

David Silva pelea un balón durante su etapa en el Celta de Vigo.

Pero ahí no quedó la cosa. Hablando de gestas, Fernando Vázquez no se conformó con el objetivo prioritario... fue un paso más allá. Entre las nuevas incorporaciones destaca la llegada a préstamo de un jovencísimo David Silva procedente del Valencia, su segunda cesión tras recalar en el Eibar y gracias a la que se consolidó como un jugador de presente y futuro. Nadie se olvida tampoco de Fernando Baiano.

Al final de la campaña 2005/06, el Celta acabó la temporada sexto con 64 puntos y logró la clasificación a la Copa de la UEFA. 20 victorias, entre las que destacan como visitante en Riazor, el Vicente Calderón o el Santiago Bernabéu. Todo un hito: celebrar en menos de un año un ascenso y la clasificación a Europa, algo que ya ha conseguido y que sueña -quién sabe- con repetir en esta nueva andadura en Riazor.

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