La venganza de Gnabry con su póker en la ciudad en la que le rechazaron

El extremo Serge Gnabry se convirtió en el gran protagonista de la noche del 1 de octubre en la Champions League. El Bayern de Múnich arrasó al Tottenham en su propia casa con un espectacular 2-7 en el que el alemán anotó un póker de goles.

No pudo ser mejor el estreno goleador del internacional germano en Champions League. Cuatro dianas para colocarse como máximo artillero de la competición precisamente en un escenario especial.

Su carrera comenzó en las categorías inferiores del Arsenal, donde comenzó a llamar la atención por su potencial y habilidad física. Sin embargo esto no llegó a confirmarlo dentro del campo por la falta de oportunidades que tuvo en la Premier League.

Ni a las órdenes de Arsene Wenger en el conjunto 'gunner' ni a las de Tony Pulis en el West Bromwich Albion. Su bagaje en las cuatro temporadas desde su debut en la 2013/14 hasta su adiós en 2016 fue de 11 partidos disputados únicamente en la liga inglesa.

Ese año le repescó el Werder Bremen de su país natal y en Alemania comenzaron sus actuales cifras goleadoras. Cinco millones pagaron por él los 'Werderaner' y lo vendieron por tres 'kilos' más el verano siguiente al Bayern de Múnich después de marcar 11 tantos con sólo 21 años.

Su cesión al Hoffenheim confirmó lo que ya se preveía y volvió a lucirse alcanzando la decena de goles, misma cifra que el año siguiente ya en el Bayern. Por aquel entonces ya había debutado incluso con la selección absoluta de Alemania, aunque volvió a 'bajar' para arrebatarle a España el Europeo sub 21 de 2017.

Con los de Joachim Low suma unos números asombrosos de cara al gol: nueve goles en 10 partidos. Aún le faltaba la Champions League y, con su póker al Tottenham en Londres, la que fue su casa, Serge Gnabry pudo saldar sus cuentas pendientes contra el club que fue su enemigo durante su etapa en el Arsenal.