Balaídos se prepara para un partido con aroma a final

Celta de Vigo y Valencia protagonizan este domingo un duelo dramático, especialmente para el cuadro visitante, en Balaídos. Los vigueses están obligados a reaccionar tras ganar únicamente uno de sus últimos siete partidos y los valencianistas sin margen de error en la pelea por eludir el descenso. El choque es una final para ambos equipos. En Vigo existe cierto temor al descenso, pese a que el conjunto de Carlos Carvalhal suma 39 puntos y solo quedan quince en juego. El técnico quiso rebajar la tensión que se aprecia en el celtismo asegurando que la plantilla no está nerviosa ya que hace cinco meses todos hubiesen firmado estar en esta situación a falta de cinco jornadas de Liga. Balaídos se prepara para un domingo con aroma a final.

Lo cierto, y así lo reflejan los números en las últimas siete jornadas, es que Celta ha entrado en una preocupante dinámica de juego, que ha coincidido con un bajón en el rendimiento de Iago Aspas. El internacional español, además, encendió el jueves las luces de alarma de la ciudad deportiva Afouteza, al retirarse antes de tiempo del entrenamiento por unas molestias en la rodilla. La trascendencia del duelo, no obstante, hará que juegue el choque. Carvalhal aseguró que el moañés "está al cien por cien".

Los que no estarán sobre el césped de Balaídos son el central Joseph Aidoo y el lateral izquierdo Javi Galán, dos de los indiscutibles de Carvalhal. Ambos cumplirán sanción. Sus puestos serán ocupados, en principio, por Renato Tapia y Franco Cervi, respectivamente. El internacional peruano regresa al equipo después de no poder viajar a Getafe por un motivo personal, mientras que el argentino es el elegido por el técnico celeste por delante del lateral del filial Medrano.

Con la línea medular para Fran Beltrán, Gabri Veiga, Carles Pérez y Luca de la Torre la principal duda radica en saber quién acompañará a Iago Aspas en la delantera. El Celta necesita goles, los de Aspas y Veiga, pero también los de Strand Larsen, Seferovic, Carles Pérez y Paciencia. Ninguno de los 'nueves' del Celta está cuajando una buena temporada. Balaídos será un apoyo para el equipo. Carvahal pidió al celtismo su apoyo en los momentos malos tras dar las gracias por el recibimiento que están organizando las peñas.

El Valencia, un incómodo rival que lucha por evitar el descenso

Por su parte, el Valencia afronta esta duelo mucho más agobiado dentro de la pelea por la salvación, aunque esté fuera de los puestos de descenso. Los 34 puntos que le hacen ser cuarto por la cola son los mismos que tiene el Getafe que es antepenúltimo y son solo tres mas que los que tiene el Espanyol, que es penúltimo.

El equipo de Rubén Baraja afronta este encuentro tras haber podido rescatar un punto de su duelo autonómico con el Villarreal de la pasada jornada. El paso de los días ha ‘aumentado’ el valor de ese empate pero también la sensación de que el equipo ha adquirido la madurez suficiente para entender sus límites en esta complicada pelea.

La gran duda durante toda la semana respecto a los planes del técnico ha estado y está en la punta de ataque. Con Edinson Cavani sancionado, al igual que el lateral Thierry Rendall, y Marcos André lesionado, el único delantero que le queda en la primera plantilla es Hugo Duro que no se ha ejercitado con el grupo hasta este mismo sábado por molestias y que, aunque convocado, será duda hasta última hora.

Si el madrileño está en buenas condiciones parte con opciones de ser el ‘nueve’ titular. Si no lo está, las opciones pasan por reconvertir a Samuel Lino o a Justin Kluivert, que reaparecerá tras varias semanas lesionado o bien por dar entrada al joven Alberto Marí. Su presencia reforzaría el peso de los canteranos en las últimas jornadas.

Aunque la plantilla del Valencia se ha conjurado para evitar las cábalas, la jornada podría serle especialmente propicia por los rivales del resto de equipo inmersos en esta lucha. De momento, afrontará su choque con la tranquilidad de que el Cádiz y el Almería han perdido esta jornada. Además, el Espanyol recibe el domingo a un Barça que se puede proclamar campeón de la Liga. El Valladolid, que también tiene 35 puntos, tiene una complicada visita del Sevilla.