Corría el minuto 94 y 39 segundos cuando Sergi Roberto empujó a la red el balón con la fuerza de todos los culés. Un gol, el suyo ante el PSG, que puso patas arriba el Camp Nou, Barcelona y todos los rincones del mundo en los que hubiera un solo aficionado del Barça. Y por supuesto entre ellos la Penya blaugrana les 3 xemeneies.
Remontar una eliminatoria con un marcador tan adverso a base de casta, coraje y pundonor era una de las asignaturas pendientes de este Barça, acostumbrado a galopar a sus anchas por las verdes praderas europeas con el emperador Leo Messi a la cabeza. Sin embargo, la mágica noche del 8 de marzo de 2017 será recordada por siempre por cualquier aficionado. El día en el que la palabra fútbol cobró todo su esplendor y sentido con una remontada digna de aparecer en los libros de historia del deporte.
El gol de Cavani en la segunda mitad del partido de vuelta en el Camp Nou dejó helado el coliseo azulgrana, aunque no restó ni un ápice de esperanza en los jugadores, los grandes creyentes de una gesta tan difícil como inverosímil. Neymar comandó, ejecutó y percutió en la maltrecha defensa parisina; Messi intimidó e insistió con su mera presencia a los jugadores rivales; Suárez escavó cualquier resquicio y hueco en el esquema táctico de Unai Emery; y Sergi Roberto, simplemente, fue el héroe definitivo.
En una de las miles de peñas azulgranas que se extienden a lo largo y ancho del planeta, en la Penya blaugrana les 3 Xemeneies, en Barcelona, sufrieron como el resto de millones de culés con el gol de Cavani que parecía socavar cualquier atisbo de esperanza en darle la vuelta a la eliminatoria tras el 4-0 de la ida. Su presidente, Ramón Borràs, explica con gran emoción cómo vivió un partido eterno en lo literal y lo figurado: “Contra el PSG esto estaba que ardía y no pude verlo mucho porque me pongo muy nervioso y lo vivo con mucha emoción. Algunas veces incluso me tengo que salir. Cuando ellos marcaron el gol algunos se fueron a casa, porque son vecinos de la zona, y cuando marcamos volvieron de nuevo. Abrimos botellas de cava y lo pasamos estupendamente”, señala.
En esta peña de la Ciudad Condal suelen reunirse, según Borràs, “unas 50 personas”, y señala que el local “se nos queda pequeño”. Los numerosos socios de la peña no faltan a su cita semanal con el Barça y sus amigos azulgranas, con quienes han vivido algunos de los mejores y peores momentos de la historia reciente del club culé.
A pesar de su corta historia (fue fundada en 2009), esta peña ha vivido los mejores y más gloriosos años de la historia del FC Barcelona. Desde el triplete y posterior sextete con Guardiola al último triplete con Luis Enrique. Todo ello, claro está, con Leo Messi al frente. En su sede, sita en el bar barcelonés de “el racó de Guillen”, adornan las paredes algunos cuadros con fotos y recuerdos de los socios. Viajes y momentos compartidos con un denominador común: el Barça. Una camiseta, la segunda de la temporada 2005-2006, comanda uno de los rincones del lugar. Está firmada por algunos miembros de aquella plantilla como Ronaldinho, Deco, Xavi o Eto´o. Justo al lado, un retrato inmortaliza el gol de Belletti ante el Arsenal que supuso la segunda Champions del Barça en París.
En otro de los rincones, una fotografía más reciente refleja las firmas de la plantilla de la temporada 2013-2014, con el ‘Tata’ Martino al frente. Las firmas de Piqué, Dani Alves o Messi comandan la instantánea que lucen con orgullo en esta humilde peña culé de Barcelona.