Nadal no jugará más en 2014
La derrota ante Coric en Basilea bajó el telón de la temporada para el campeón de 14 grandes: Rafael Nadal no competirá en el Masters de París-Bercy ni en la Copa de Maestros de Londres y pasará por el quirófano para operarse de apendicitis.
El mallorquín, que disputaba esta semana el torneo indoor de Basilea, explicó tras despedirse en los cuartos de final que se operará el próximo 3 de noviembre y después se realizará un tratamiento en la espalda, buscando eliminar las molestias que le han perseguido desde que perdiese la final del Abierto de Australia ante Stan Wawrinka.
“Es momento de decir adiós a la temporada” declaró el balear tras ceder ante Coric. “No voy a competir en París ni en Londres. No estoy lo suficientemente competitivo” siguió, confirmando que la temporada 2014 llegó a su fin y que por cuarta vez renuncia a la Copa de Maestros (2005, 2008, 2012, 2014) habiendo clasificado para ello.
“Voy a operarme el 3 de noviembre y la siguiente semana me trataré la espalda. Eso implica unos cuantos días” cerró el mallorquín, situado ahora entre algodones para reparar sus grietas y volver sano en los albores de la temporada 2015. Nadal, que cerrará como número 3 la temporada, encara lo que tantas veces ha digerido: la misión de volver a empezar.
Bajo control y en tratamiento desde hace unas semanas. Nadal ha padecido un principio de apendicitis durante su estancia en China. Después de competir en Pekín, se disponía a participar en el Masters de Shanghái, cuando empezó a sentir molestias en la zona baja del estómago durante la noche del sábado que le impidieron descansar con normalidad. “Tengo un principio de apendicitis pero intentaré jugar este miércoles. Luego decidiré qué hago esta temporada”, apuntaba el español este martes en rueda de prensa después de su entrenamiento.
De momento, nada impedirá que se estrene este miércoles ante Feliciano López en la segunda ronda del ATP 1000 asiático. “Estoy en Shanghái y quiero jugar mañana, aunque hay que ver cómo me levanto, la evolución es buena y cada vez me duele menos, pero me duele”. Con estas palabras Nadal define la situación que atraviesa en estos momentos. “Fui a hacerme una ecografía. Vieron que tenía el apéndice inflamado y me comentaron que era un principio de apendicitis”, confirma.
En este sentido, no esconde que tendrá que pasar por el quirófano, aunque esperará a llegar a casa para ponerse en manos de sus médicos de confianza: “No quiero operarme fuera de casa, aunque me han dicho que tarde o temprano tendré que hacerlo”. Además, confiesa que quiere “intentar evitar la cirugía, sobre todo en un país que no es el mío”. No obstante, fuentes cercanas al jugador advierten que a su regreso a España decidirá cuándo es el mejor momento para la intervención. Eso sí, Nadal envía un mensaje de calma: “Ahora está todo bajo control”.
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