El Equipo C
El Athletic Club va poco a poco recuperando el tono competitivo a base de buenos resultados. Los últimos compromisos saldados con victorias ante Sporting, Partizan y Valencia incluyendo incluso los empates a domicilio ante Deportivo y Real Sociedad le han colocado en una zona de la clasificación más acorde a sus condiciones.
Curiosamente, o no tan curiosamente, en esos encuentros Ernesto Valverde ha apostado por un bloque de jugadores titulares. Lo que se ha venido en denominar el ‘equipo A’. Un adjetivo, que por cierto, para nada ha gustado en el vestuario rojiblanco.
Y es que si existe un ‘equipo A’, también hay un ‘equipo B’, que cosechó resultados totalmente opuestos en las citas ante Villarreal o AZ Alkmar por ejemplo.
El calificativo puede que lo haya sacado a la luz la prensa pero sin embargo, el verdadero precursor del asunto ha sido Ernesto Valverde con sus decisiones. Ha sido el ‘Txingurri’ el que se ha afanado en cambiar totalmente el equipo, lejos, muy lejos, de las posibles rotaciones que pueden estar justificadas para el descanso de algunas piezas del equipo.
Si ya hemos visto un ‘equipo A’ y un equipo B’ ¿por qué no probar con un ‘equipo C’? Me refiero a una mezcla de jugadores de ambos conjuntos, algo más racional, vamos. Y es que los cambios radicales sobre todo en la línea ofensiva del equipo están normalmente abocados al fracaso en varios sentidos.
Por un lado en el propio partido que se está disputando y por otro en los propios futbolistas a los que se envía un mensaje de que para nada o casi nada se cuenta con ellos. No valen en su conjunto y se duda de ellos incluso individualmente como posibles soluciones en otros momentos.
Hay ejemplos claros. Hasta la llegada de Raúl García al Athletic, el equipo rojiblanco había disputado ocho encuentros oficiales en los que además había levantado el título de la Supercopa. Javi Eraso era entonces el mediapunta titular del equipo de Valverde. El centrocampista navarro jugaba rodeado de ‘titulares’, no con el ‘equipo B’ alrededor.
Con esto quiero decir que los Sola, Viguera, Aketxe, etc... pueden funcionar también si aparecen en una alineación con un bloque notable de jugadores habituales y no rodeados de todo lo contrario.
Existe un término medio, un ‘equipo C’, que puede rendir a un nivel similar al A y aprovechar para ir dando descanso a jugadores que lo necesiten. En las próximas semanas Valverde tendrá la oportunidad de demostrarlo, si lo estima oportuno, porque volverán a juntarse tres partidos por semana (Betis, Partizan y Espanyol).
Esperaremos acontecimientos.
Por Gorka Acitores Periodista deportivo de Onda Cero Bilbao.