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A perro flaco no todo son pulgas

Politano conduce un balón.

El Inter de Milán vuelve, un año más, a vivir una temporada irregular. El conjunto nerazzurro se quedó de forma prematura fuera por la carrera del título de Serie A, eliminado de forma decepcionante de la Champions League, apeado en los cuartos de final de la Coppa Italia y por último fuera de la Europa League a manos del Eintracht de Frankfurt.

Por todo ello, el cuadro milanés sólo tiene como objetivo de cara al final de temporada luchar por asegurarse plaza de Liga de Campeones para la próxima campaña. Para colmo, para acabar lo más arriba posible, está contando con la ausencia de Mauro Icardi, su jugador franquicia y que está peleado con el club por no querer renovar su contrato.

Por su fuera poco, la mayor parte de los fichajes realizados el pasado verano no han terminado de cuajar y en el plano de vista institucional también se han vivido algunos vaivenes que no han ayudado a mantener la estabilidad.

Es por todo ello que en esta ocasión al que escribe le gustaría reconocer la labor callada de uno de los futbolistas que mayor regularidad ha demostrado en toda la temporada: Matteo Politano.

El futbolista de la cantera de la Roma llegó al club milanés el pasado verano cecido con opción de compra procedente del Sassuolo donde ya había llegado a rendir a un gran nivel. Sólo unos meses le bastaron al Inter para decidirse a hacerse con el jugador en propiedad a cambio de 20 millones de euros. 

No llegaba al Inter con la vitola de ser un fichaje diferencial, pero tras más de siete meses de competición se ha consolidado como el mejor de cuantos nuevos futbolistas aterrizaron en San Siro.

Su gran golpeo de balón y su capacidad de desborde unidos a su sacrificio defensivo partiendo desde la banda derecha del ataque lo han convertido en un fijo en el once de Spalletti y en habitual en las convocatorias de la selección italiana. 

A sus 25 años y en su primera temporada completa en un equipo importante del fútbol italiano, Politano ha demostrado que, más allá de lo ya ofrecido, tiene mucho margen de mejora. 

Suma cinco goles y seis asistencias en los 38 encuentros que ha disputado hasta la fecha y ha aumentado su valor de mercado -según Transfermarkt- en ocho millones hasta los 30 actuales. 

Pese a la victoria en el último Derby della Madonnina, en el Inter se siguen viviendo tiempos difíciles, pero sigue quedando esperanza: Politano ha demostrado que tiene madera de líder. 

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