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Un Barça contumaz y empeñado en decepcionar al Athletic

Javier Castaños

El próximo miércoles 24 de enero, en San Mamés, el Athletic Club tiene ante sí la oportunidad de pasar por quinta vez consecutiva a las semifinales de la Copa del Rey. Para ello debe derrotar a un equipo que nos ha dado muchos quebraderos de cabeza en lo deportivo, sobre todo con Leo Messi, el Barça, y que ha decepcionado también, con múltiples feos, a la afición rojiblanca, especialmente a partir de los célebres y convulsos años 80 del argentino César Luis Menotti y Javier Clemente.

Primero, desde el FC Barcelona y su entorno mediático quisieron acabar con la carrera del zaguero internacional Andoni Goikoetxea por la dura entrada en un partido jugado en el Camp Nou a Diego Armando Maradona, poniéndole por todo el planeta el mote de "carnicero" al central de Alonsotegi.

Olvidando sucintamente que el defensa suyo más reconocible, Migueli, alias ‘Tarzán’, acabó con la carrera del futbolista mallorquín del Real Madrid Paco Bonet con una fuerte entrada en la final de la Copa del Rey de 1983, acción que le dejó malparado de la rodilla.

Andoni Goikoetxea responde a las agresiones previas de Diego Armando Maradona, en la final de Copa de 1984, disputada en el Santiago Bernabéu entre el Athletic Club y el Barça.

Un Barça empeñado en decepcionar al Athletic

Después, en la famosa final del 84, cuando finalizó el encuentro en el Santiago Bernabéu -con victoria vasca con el gol de Endika Guarrotxena a pase de Estanis Argote-, en lugar de felicitar a nuestros jugadores los agredieron, con Maradona a la cabeza, dando el ‘Pelusa’ argentino un rodillazo en la cara al navarro Miguel Sola mientras este estaba indefenso en el suelo causándole daños importantes y una conmoción cerebral.

A partir de ahí surgió la bochornosa tangana que ha pasado a la historia como la 'final de las tortas'...

Maradona agrede a Miguel Sola en la final de Copa de 1984, disputada en el Santiago Bernabéu entre Athletic Club y FC Barcelona.

Aunque las cosas cambiasen a posteriori gracias a caballeros como Carles Puyol, siempre ha existido cierto pique por la actitud de ciertos jugadores blaugranas (Rivaldo, Samuel Eto’o, Neymar Jr.) con los leones y por el añadido de decisiones arbitrales contrarias a nuestros intereses.

Conductas y señalizaciones que ahora se han convertido en más intrigantes todavía con el llamado ‘Caso Negreira’. Uno de los mayores escándalos de la historia del fútbol. Esperemos que alguno de sus discípulos no nos amarguen la noche el miércoles en La Catedral como le ha ocurrido a la UD Almería de Gaizka Garitano en el Santiago Bernabéu...

Por ser un partido tan importante para Bilbao y para Bizkaia, me gustaría ver la Villa repleta de banderas rojiblancas para animar a los nuestros a volver a sacar la gabarra 40 años después. Yo desde luego la tendré puesta en mi terraza. Tenemos que empujar entre todos.

Aurten Bai! ¡Aupa Athletic! Koparen Bila!

· Un artículo de opinión obra de Javier Castaños

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