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Y no dice ni "mu" a su salida de Paterna

Manu Gimeno

A media tarde saltaban las alarmas desde Barcelona, cuando la prensa deportiva catalana informaba de acuerdo total por Alcácer. El Valencia CF lo desmentía, pero esos medios citaban a fuentes de la secretaría técnica culé y parecía que todo llegaba a su fin. A la hora de este mensaje directo que llegaba de Barcelona, salía la información y se hacía público que el futbolista se había reunido con Layhoon Chan para pedirle a la presidenta del Valencia salir del club porque no se siente feliz.  Ya no había vuelta atrás, a Alcácer le quedan horas en el club ché.

Pero el futbolista seguía entrenando en Paterna, la sesión de trabajo seguía su transcurso normal, pero cada vez llegaban más aficionados para esperar a los futbolistas a la salida de la Ciudad Deportiva y fotografiarse con ellos. Todos preguntaban por Alcácer y no daban crédito a las informaciones que lo situaban fuera del club y cerca de jugar en el Barcelona. Muchos leían en su teléfonos móviles toda la información que se publicaban en las diarios digitales y que decían que Paco estaba casi fuera del Valencia CF y que había pedido marcharse del club que le vio crecer como futbolista.
Y ese momento se produjo cerca de las 21:00 horas de la noche. Paco enfiló la salida de la Ciudad Deportiva, paró su coche para hacerse fotos con las decenas de aficionados que aguardaban y fue uno de los momentos más extraños que se recuerdan en Paterna porque la tensión de cortaba con cuchillo, y es que la gente le preguntaba por el Barcelona y él callaba, no respondía a ninguna de ellos. Fijó la mirada adelante, casi perdida, tan sólo desviaba los ojos para posar para la foto y de su boca tan sólo salió un "pon el flash o no saldrá la foto". Otro niño le preguntó si iba a salir públicamente a decir que se iba al Barcelona, pero siguió callado, sin decir ni "mu". Acabó con las fotos, puso la marcha y abandonó Paterna con su coche.

La resignación de Ayestarán

Se le espera este jueves en la Ciudad Deportiva a las 9:00 horas para trabajar con sus compañeros, puede que sea el último entrenamiento que haga con sus compañeros o quizás el del viernes, pero los mensajes no verbales que mandó el propio jugador es que se marcha a Barcelona y parece que será inminente. A todo esto, nada más abandonar Paterna, Paco Alcácer, llegó el técnico ché Pako Ayestarán, que había salido a hacer un poco de carrera continua por los alrededores de la Ciudad Deportiva.
Su gesto era serio, muy serio, pero Pako pasó desapercibido para los aficionados, pero un seguidor sí que lo reconoció y lo paró. Pako atendió su pregunta, fue casi en privado, pero la respuesta del técnico debió ser un clamor porque se encogió de hombros e hizo una mueca expresiva de resignación. Ayestarán se estaba haciendo a la idea de que no sólo perdió a André Gomes hace medio mes, sino que ahora le pasaba con Alcácer.

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