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Se rompe en defensa

Molinero lucha un balón ante un rival del Almería (Foto: LaLiga).

El Sporting de Gijón ha perdido a domicilio ante el Almería, después de una muy mala segunda parte. Las novedades en defensa condenaron los intereses rojiblancos, que encajaron el empate de penalti y le anularon un gol por un fuera de juego muy riguroso. 

Con sorpresas en todas las líneas. Por fin el cambio en el doble pivote y el reconocimiento para Pablo Pérez. Una revolución o el ejercicio de memoria que había prometido Rubén Baraja después de la Copa del Rey. Sin excepción, hoy los sportinguistas tenían ganas de ver a su equipo.

A los rojiblancos, de todos modos, les costó adaptarse en los primeros minutos. También por el arreón inicial de los locales, frenado en seco por el primer gol de los de Rubén Baraja. Obra de tres de sus novedades. Robó Salvador, se la dio a Djurdjevic, que se deshizo de su adversario y asistió a Pablo para el 0-1 en el minuto 10. Mejor inicio imposible para el 'nuevo Sporting'.

O quizá todo vino muy rodado demasiado pronto. El Almería no acusó el golpe y mantuvo su ímpetu en busca de la portería de Mariño. Molinero, desplazado al lateral derecho, y Babin no estaban cómodos. Robin Lod y Carmona, ausentes, tampoco en los ataques por banda, mientras los locales avisaban de sus intenciones con un disparo de Juan Carlos que salvó Mariño en el 18'. Se despistó la defensa gijonesa en una acción de las tantas que quedaban.

Le ocurrió lo mismo en el 34', justo después de un remate lejano centrado de Salvador. El balón en largo sorprendió a los centrales. Para compensarlo fue Molinero, probablemente demasiado revolucionado ante Álvaro Giménez dentro del área de Mariño. El mismo Álvaro lo transformó para el 1-1.

Con el empate, y una ligera reacción del Sporting, se llegó al descanso. Salvador, así como la asociación entre Djurdjevic y Pablo Pérez invitaban al optimismo. En el otro lado la debilidad defensiva y la incomparecencia de los extremos. 

Y se impuso lo negativo. El conjunto gijonés desapareció en la segunda parte. El Almería fue superior, mucho mejor. Luis Rioja pudo adelantar a los suyos tras un error de Geraldes. Minutos después, el luso compensó su fallo con una buena acción defensiva para evitar el segundo de los locales.

Pablo Pérez y Djurdjevic ya no se encontraban, Lod y Carmona seguían desaparecidos, cuando Salvador hizo el gol de la jornada, de espuela, tras un saque de esquina. Pero se lo anuló el colegiado. Por un fuera de juego, sí lo fue, milimétrico.

A los nuevos males del Sporting continuaba el de la primera parte. La flojera defensiva. Prueba de ello el segundo tanto del Almería, en el 74', en un error en cadena. Primero Molinero perdió su sitió, Álvaro no apareció en su ayuda, y al rescate acudió Geraldes, dejando vacía su zona. Tampoco lo compensó Carmona, así que Andoni libre de marca disparó para batir a Mariño en el minuto 74.

Baraja buscó soluciones dando entrada a Neftali por un buen, aunque exhausto, Pablo Pérez. Tuvo una ocasión el Sporting, no elaborada sino de falta directa, por medio de Carmona, que envió el balón al palo. Tampoco sirvió el cambio de Nacho por Santana, cuando el reloj ya rozaba el minuto 90.

Una nueva derrota en definitiva. Esta vez con la debilidad defensiva como clave. Como la ausencia de las bandas o la falta de frescura en el segundo acto. En resumen de la situación: dos de 15 puntos a domicilio. Sólo una victoria en los últimos nueve partidos de la Liga 1|2|3 y el descenso que ya está más cerca que el play off por el ascenso.

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