Euforia controlada en el Sporting

El vestuario del Sporting irradiaba alegría tras la importante victoria cosechada en tierras leonesas. Así lo demostraron tanto los jugadores como el cuerpo técnico, que iban accediendo al mismo con una sonrisa de oreja a oreja. La misma que transmitía el técnico Paco Herrera, aunque el catalán guarda cautela y solo piensa en el encuentro del próximo viernes ante el Huesca.

Segundo triunfo consecutivo del Sporting para subirse a lo más alto de la clasificación, al menos hasta que termine la novena jornada. Tras el triunfo, los jugadores fueron accediendo al vestuario del Reino de León cargados de felicidad. La que te da el saber que el plan establecido se está cumpliendo y que los objetivos van por buen camino. 
Abrazos, saludos, risas. Todo ello se dejó ver el pasado martes en el vestuario rojiblanco. Pero entre tanta felicidad apareció la calma, la que imprime Paco Herrera a los suyos, conocedor de que no hay momento para el despiste. "Ya tenemos el camino, ahora hay que seguir. Descansar, mañana descansar, el viernes tenemos otro partido", gritaba el catalán a los suyos dentro de la sala, demostrando ganas, muchas ganas de devolver al Sporting al lugar que se merece.