El Sporting de Gijón cierra este sábado una temporada desastrosa, traducida en el descenso de categoría tras el sinfín de despropósitos que marcaron la planificación deportiva. Uno de ellos fue el de contar con tres porteros, fichando a dos y dando salida incentivada a Alberto García. Por eso el conjunto gijonés cuenta con tres metas con contrato para el próximo curso en Segunda. Uno de ellos saldrá y todo apunta a que será Iván Cuéllar.
El portero emeritense, nueve años después de su llegada, podría disputar este sábado su último partido como jugador del Sporting. Cuéllar cree que ya ha cumplido su etapa en Gijón, donde esta temporada ha sido una de las más difíciles para él a pesar de su buen nivel. Su relación con la afición no se ha visto deteriorada, pero su futuro parece que no pasa por Gijón.
Si Rubi le mantiene en la alineación, Cuéllar podrá despedirse de El Molinón por si se confirma su salida. Con el Sporting ha vivido sus mejores tardes como profesional, como la del ascenso a Primera o la permanencia ante el Villarreal. Por eso, para Cuéllar será un partido especial, mucho más que para los siete cedidos que este curso ha tenido el Sporting. La del sábado será un encuentro de despedidas y, probablemente, el fin de un ciclo para Iván Cuéllar