Soñando en el 'Teatro de los Sueños'

Álvaro Ramírez IIIEs pretemporada, es verano, es un partido amistoso, pero es imposible que un triunfo en Old Trafford, ante el Manchester United, no genere ilusión, no genere optimismo. Y más si el Sevilla lo hace como lo ha hecho este viernes, con una primera parte magnífica y con un resultado que invita a pensar en positivo, muy positivo. 

Realmente, la victoria ante los 'red devils' no cuenta estadísticamente, no suma puntos ni pasa eliminatorias, pero sí es una prueba importante para testar en qué punto está este equipo, este nuevo Sevilla de Unai Emery. Esta prueba, además, ha llegado con argumentos. El equipo hispalense ha barrido en la primera media hora al Manchester United en el partido de homenaje a uno de sus ya míticos jugadores, Rio Ferdinand. En esa primera media hora llegaron dos goles, el de Vitolo y el de Marin. Ambos, además, tras magníficas combinaciones que ejemplifican bien lo que quiere Emery de su ataque. Dinamismo, combinación, movilidad por el centro, y bandas enteras para los laterales. De esta forma el fútbol sale más fluido, se acelera la velocidad de toque en los metros finales y se encuentran opciones. Es lo que ocurrió en Old Trafford.

Además de esa fórmula conjunta, el Sevilla también ha dado buen nivel en lo individual, en las acciones personales. Muy bien Marin, pelotero caro, muy bien Perotti por el centro, y Vitolo. Además, Diogo Figueiras, en la banda derecha, ofreció un buen nivel ofensivo, así como Alberto Moreno, que completó un gran partido en una difícil prueba, ante Valencia. Y Carlos Bacca, que no marcó, ofreció un catálogo de soluciones con el balón en los pies. Todo lo hace con un sentido.
La defensa fue lo más discreto en esa exhibición de la primera media hora del Sevilla en Old Trafford, y quizás por ello hasta Beto tuvo que ofrecer un rendimiento altísimo en el partido, sacando dos pelotas claras de gol.
Esa primera parte, que pese a ser en un partido amistoso los nervionenses recordarán, fue totalmente diferente a la segunda, en la que el Manchester apretó, tuvo ocasiones, varias, y marcó un tanto. Lógico, además. Pero también el equipo hispalense supo sufrir hasta el punto de sobrevivir e incluso darse el gustazo de hacer el tercero, en una buena acción de Gameiro (jugó sus primeros minutos) que redondeó Rabello.
El fútbol, su historia, y en concreto la del Sevilla, está repleta de buenas pretemporadas, repletas de victorias (como aquella de Camacho, que acabó convirtiéndose en fiasco). Pero la victoria del equipo de Emery en Old Trafford deja más que un resultado anecdótico, deja una idea de equipo, una idea de juego y unas sensaciones, colectivas e individuales, que invitan a soñar tras pasar por el 'Teatro de los Sueños'.