Su claúsula de rescisión es de 12 millones de euros, pero el Sevilla no pretende llegar a esa cifra, así que tocará negociar con su club. En Bélgica son conscientes de los grandes ingresos conseguidos hasta la fecha por el conjunto hispalense, a los que se sumarán los de la supuesta venta de Negredo. Por eso el Brujas quiere partir de 10 millones de euros como precio de salida de Bacca. El Sevilla pujará por una cifra inferior, pero conocedor de que el futbolista quiere recalar en España.
El próximo septiembre cumplirá 27 años, y entiende que es el momento idóneo de dar el salto a una de las grandes ligas europeas. Veremos hasta donde está dispuesto a pujar el Sevilla, ya que Del Nido aseguró que como mínimo llegarán dos delanteros más, unidos al fichaje ya consumado de Rusescu.