Otro verano, otro Dos Santos
Era una petición expresa de Marcelino García Toral. El técnico asturiano había contado con el atacante en el Racing de Santander y estaba obsesionado con volver a tenerle en su equipo. Finalmente, los Spurs no cedieron y el Sevilla no estaba dispuesto a tirar la casa por la ventana con tal de satisfacer a su entrenador y contar con Gio. En el mercado de invierno regresaron las negociaciones, sin resultados, e incluso en estos dos últimos meses se ha removido mínimamente un culebrón que, por el momento, se da por zanjado.
Sin embargo, el apellido Dos Santos sigue centrando la atención sevillista. Ahora es Jonathan, hermano menor de Gio, quien puede acabar jugando en el conjunto dirigido por Míchel, que ve en el centrocampista del Barcelona la guinda para afrontar la temporada que acaba de inaugurarse. De esta forma lo describe el agente de José Campaña, cuya salida puede verse precipitada precisamente por la aspiración del Sevilla de incorporar al de Monterrey.
Jonathan es más una oportunidad de mercado que un capricho del técnico blanquirrojo. Pero lo cierto es que, dada la situación, Míchel espera que esta vez la historia del Sevilla con la familia Dos Santos tenga un final feliz. Por más que otro hermano del jugador, Eder, haya manifestado su deseo de que continúe en la Ciudad Condal.
El Barcelona ha dejado claro a Jonathan que lo mejor es aceptar una salida, aunque el joven futbolista sigue en sus trece de permanecer en el conjunto azulgrana, quizás por miedo a sufrir lo mismo que le ocurrió a Gio. No quiere alejarse del Camp Nou y, por este motivo, no ve con buenos ojos salir cedido al Sevilla. "A veces, la posibilidad de estar en el Barça pasa por estar un tiempo fuera de él. Pero convencer a alguien de que debe salir no es viable si el propio jugador no tiene ese convencimiento", ha declarado Andoni Zubizarreta, director deportivo culé. Unas palabras que, sin hacer alusión directa a Jonathan, dejan muy a las claras cuál es el pensamiento del futbolista.
Queda una semana para el cierre del mercado y en el Sevilla son conscientes de que si el mexicano cambia de opinión será a última hora. Con el club catalán está todo pactado, pero el miedo a abandonar la disciplina azulgrana mantiene a Jonathan en la creencia de que lo mejor es esperar una oportunidad dentro de la propia entidad, a la que llegó en infantiles.
El fichaje de Song y el hecho de que Tito Vilanova, por el momento, no le esté concediendo un sitio podrían revocar al mexicano de su decisión. Solo así acabaría jugando este curso con los del Ramón Sánchez-Pizjuán.