El de San Fernando, hace meses, ya comentó que su vinculación con el Sevilla iba más allá de lo profesional, que no habría problema ninguno y que él quería seguir pero que no quería convertirse en un "novio coñazo". Está claro que en el club nervionense no lo consideran así, sino todo lo contrario, y por eso siguen confiando en él para confeccionar deportivamente el Sevilla del futuro.
Monchi, que llegó al puesto en 2000, de la mano de Roberto Alés, ha sido una de las piezas claves de la mejor etapa histórica del conjunto nervionense. Fue el responsable de los fichajes de los mejores jugadores de la historia del club en los últimos tiempos, si bien en las últimas temporadas su balance ha incluido algunas máculas con incorporaciones que no han sido todo lo exitosas que se esperaban.
Con todo, la balanza en el haber del director deportivo sigue siendo, con mucho, positiva. Y así lo ha considerado el club.