Marcelino García Toral se encuentra en su tierra, Asturias, descansando y cargando pilas para llegar a Sevilla el próximo 4 de julio con toda la energía posible. Entre Careñes y Gijón, el técnico sevillista sigue al día la actualidad de su nuevo equipo y también aprovecha la ocasión cuando se le presenta para atender a los medios de su región, donde es un ídolo. Ni siquiera allí ha pasado desapercibida la polémica originada con su ya archiconocido "no", y en una entrevista concedida a El Comercio, ha querido zanjar el asunto optando por la vía más diplomática posible: "Siempre actuaré con el máximo respeto hacia cualquier club y, sobre todo, hacia el mío. Al Betis le deseo lo mejor e intentaré que no se vuelva a repetir una circunstancia similar. Lo mejor será, a partir de ahora, no hacer ninguna valoración del Betis".
Al margen de este asunto, en Gijón andan muy pendientes de la decisión que adopte Marcelino sobre Armenteros, a quien el Sporting quiere incorporar a toda costa tras su excepcional temporada con el Rayo Vallecano. La postura de técnico es bastante clara: "Iremos viendo durante los entrenamientos y, si tenemos dudas, se hablará en el momento para no perjudicar al futbolista. No vamos a abusar en el tiempo de una situación para luego decir que no al futbolista y que se le cierre alguna puerta". De hecho, el argentino iniciará la pretemporada con el primer equipo a pesar de la dura competencia en ese puesto con Perotti y Diego Capel.
