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El fichaje de Ivan Ratikic por el Sevilla estuvo marcado por la presión del Atlético de Madrid hasta el último suspiro. A nadie escapa que dentro del abanico de clubes interesados en el jugador croata se encontraban los rojiblancos, hasta el punto de intentar torpedear su firma con la entidad hispalense en la misma noche del jueves. Según ha podido saber ElDesmarque, cuando Rakitic se encontraba ya en Sevilla recibió una llamada desde el conjunto madrileño instándole a romper el acuerdo con los sevillanos, debido a la presión ejercida por su anterior representante, Max Urscheler, que era quien negociaba la operación con el Atlético.
La oferta constaba de un suculento e importante aumento de la ficha pactada con Del Nido y Monchi, pero el jugador declinó dicha opción manteniéndose fiel a su palabra. De hecho, durante toda la tarde del jueves los dirigentes atléticos intentaron ponerse en contacto con el jugador y su hermano, su verdadero agente, pero no lo consiguieron hasta la cena.
