A falta de fichajes, Víctor sigue de cerca a Carbonell

El Real Zaragoza volvió a la senda de la victoria en Los Pajaritos tras superar al CD Numancia. Un triunfo que sirvió como homenaje a Raphael Dwamena, de baja indefinida por problemas de salud. Un resultado que, sin embargo, no oculta el vacío que deja el delantero ghanés en el proyecto del equipo aragonés y al que Víctor Fernández y la dirección deportiva deben dar solución.

Por el momento, el técnico zaragozano no piensa en fichajes. El primer objetivo del entrenador fue el de readaptar a los futbolistas que ya están en la plantilla y que pueden ocupar el lugar del delantero, pese a que, como el propio Víctor reconocía, las características de Linares o Pombo son muy diferentes a las de Dwamena.

En paralelo debería trabajar la dirección deportiva, aunque por el momento, poco se sabe de lo que pueda llevar entre manos Lalo Arantegui. Al margen de la hipotética baja de larga duración del futbolista blanquillo, que otorgaría la oportunidad de ocupar su ficha, también se encuentran disponibles los jugadores en paro, a los que parece no haberse mirado hasta la fecha. Nombres de exzaragocistas como Sergio García, deseado semanas atrás, o Rodri, se mantienen sin equipo. Aunque no parece que vaya a haber movimientos por el momento.

Carbonell llama a la puerta con goles

Mientras se espera al desarrollo de los acontecimientos, Víctor Fernández le sigue de cerca la pista a Luis Carbonell. El delantero, de 2003, y que comparte origen con el técnico, en el barrio Oliver, es una de las grandes esperanzas de la cantera blanquilla. Recién estrenado en el conjunto juvenil de División de Honor y después de haber sufrido una grave lesión de rodilla es la gran revelación del equipo. Confirma así lo apuntado en categorías inferiores y que sirvieron para que posaran sus ojos en él clubes como el FC Barcelona.

Un rendimiento que le ha valido para ejercitarse ya con el primer equipo a las órdenes de Víctor, que además tuvo ocasión de verle jugando al máximo nivel, destacando en la primera parte del equipo en el estreno en la Youth League. Aunque no pudo anotar frente al Korona Kielce, sí lo hizo este fin de semana, en dos ocasiones, una de penalti y otra de tacón, ante el Nàstic de Tarragona. Actuaciones que bien podrían permitirle tirar la puerta del Real Zaragoza, añadiendo al olfato goleador una habilidad y regate difícil de encontrar en el fútbol actual y que le permite jugar tanto como delantero centro como partiendo desde ambas bandas. Una solución de la casa para un problema inesperado.