La pasión oculta de Shinji Kagawa

Shinji Kagawa es el gran fenómeno del inicio de la temporada del Real Zaragoza. Después de una presentación al nivel de los jugadores más importantes del continente, el japonés tuvo ocasión de anotar su primer gol con los blanquillos en Ponferrada, convertido ya en todo un ídolo para la afición blanquilla.

Pero la figura del centrocampista nipón va mucho más allá de lo que puede significar un jugador del equipo aragonés. Kagawa sigue siendo uno de los atletas más afamados de Japón y un icono del deporte asiático después de una trayectoria al más alto nivel en Inglaterra y Alemania con grandes actuaciones también en la Champions League.

Es esa la razón por la que el futbolista blanquillo cuenta a sus espaldas con un buen número de patrocinadores y sigue como ejemplo del deporte nipón. Algo que se deja sentir, por ejemplo, en la última de las promociones que ha realizado, en la que tiene ocasión de la NBA. Kagawa recuerda su infancia, jugando a baloncesto siguiendo los pasos de sus padres. Incluso se atreve a lanzar a canasta. Admite además que sigue la competición allá donde va y desea que aumente el número de deportistas japoneses, que como él, han trascendido las fronteras de su país de origen.

Una muestra de la importancia del futbolista como imagen del deporte japonés ante la llegada de la pretemporada de la NBA a país del sol naciente, donde jugarán los actuales campeones, Toronto, frente a Houston, disputando dos encuentros en Saitama. Una competición que cuenta también con un jugador nipón, Yuta Watanabe, que milita en las filas del Memphis. Todo ello a las puertas de los Juegos Olímpicos, que tendrán lugar el próximo verano.