El sábado más feliz para Ander Herrera
La victoria del Real Zaragoza ante el Almería ha hecho las delicias de toda la afición blanquilla, pero en todo el fin de semana será difícil encontrar a un zaragocista más feliz que Ander Herrera. Tras la importante victoria del equipo de su alma, el centrocampista aragonés se calzó las botas en el vestuario de Wembley y se dispuso a saltar al campo para eliminar al Tottenham de las semifinales de Copa. Un sábado mágico y un torrente de sensaciones para un jugador que vio como los Spurs se ponían delante en el marcador. Tras el gol del empate de Alexis, Ander Herrera entró como un cohete en el área para desnivelar el marcador.
Combo perfecto: victoria del Real Zaragoza y el pase con su equipo a la final del torneo de clubes más antiguo del mundo, la Copa inglesa. Tal vez Herrera había salido especialmente enchufado por el triunfo de su amado Zaragoza... Teoría que no resultaría rara si se atiende a los precedentes. El exjugador blanquillo suele ir a La Romareda siempre que puede y hace dos semanas, según reveló en El Transistor de Onda Cero, esto fue lo que hizo tras ganar el derbi de Manchester: "Lo primero que he hecho al llegar al vestuario ha sido ver el 1-0 del Real Zaragoza al Huesca", manifestó el canterano zaragocista.