Desigual balance en el inicio de año
El Real Zaragoza vuelve al trabajo para comenzar 2018 con la firme intención de mejorar las prestaciones presentadas durante el último año, en el que el rendimiento de los blanquillos ha sido a todas luces insuficiente. Un deseo que deberá materializarse en el primer encuentro del año que recién comienza, frente al FC Barcelona B.
Los de Natxo González contarán con un doble reto frente al filial azulgrana. Por una parte, el de conseguir la victoria en su propio feudo, una empresa que se ha mostrado complicada en los últimos meses en los que el Real Zaragoza apenas consiguió cuatro victorias como local. Por otra, el hecho de comenzar el año con una victoria como local, algo que no sucede desde hace más de un lustro.
Y es que los primeros partidos del año no suponen demasiados buenos recuerdos para el aficionado blanquillo. Sirva como ejemplo el hecho que desde el último descenso, de los cuatro partidos disputados para iniciar el año tan sólo se ha logrado una victoria. Fue en la primera temporada ante el Sporting de Gijón a domicilio y se logró un importante 2-3 en la víspera del día de Reyes. Después, en tres ocasiones consecutivas se ha comenzado el año en La Romareda con un balance de dos derrotas y un empate. La primera decepción fue en 2015, cayendo por 0-2 ante el Valladolid. Un año más tarde se empató a 3 tantos ante la SD Huesca en el debut de Lluís Carreras en el banquillo zaragocista y finalmente, la pasada campaña, un 2017 para el olvido, que se inició con derrota frente al Girona por 0-2.
Habría que volver la vista atrás y recordar otros tiempos, con el equipo en Primera división, para encontrar la última vez que el Real Zaragoza cosechó una victoria en el primer partido del año y en La Romareda. Fue en el año 2011 frente a la Real Sociedad y se ganó por 2-1 con tantos de Sinama-Pongolle y Braulio. Ahora, la necesidad aprieta y ante un rival directo, el conjunto blanquillo tratará de retomar la buena senda para iniciar 2018 con una alegría para la necesitada afición de La Romareda.