Lugo, el principio del fin de Milla

Como sucede en la presente temporada, también en la pasada, una de las primeras salidas del Real Zaragoza fue al Anxo Carro. En aquella ocasión, en un encuentro extraño, el equipo aragonés vio como su rival era capaz de empatarle tras lograr una renta de dos goles. Una situación que generó las primeras dudas sobre la figura de Luis Milla.

Un Milla que había firmado una pretemporada notable y un inicio esperanzador después de conseguir una holgada victoria ante el UCAM en La Romareda. La diferencia de goles colocaba al conjunto aragonés en lo más alto de la clasificación y todo era alegría. Entonces se cruzó el Lugo en el destino de los blanquillos. El primer viaje del Real Zaragoza en la temporada fue un partido que se le puso pronto de cara gracias al favor del portero local, y pese al empate del equipo gallego, en el inicio de la segunda parte, un Ángel enrachado ponía el 1-3 en el marcador. Apretó el Lugo y consiguió el empate en un encuentro que bien pudo caer de cualquiera de los dos lados.
Lo que parecía poco más que un resultado anecdótico se convirtió con el tiempo en el principio del fin de Luis Milla como técnico zaragocista. El partido en el Anxo Carro supuso las primeras dudas sobre la figura de un entrenador que se había mostrado incapaz de mantener una renta de dos tantos. Llegaría después una pírrica victoria en Huesca y una dolorosa derrota ante el Levante, un baño de realidad que marcaría el camino del resto de la campaña. Para colmo, las lesiones de Xumetra y Cani supondrían un lastre demasiado pesado para el turolense, que no volvería a ganar en sus seis últimos encuentros como técnico blanquillo provocando de forma fulminante su destitución.