Diez días para ultimar las salidas

A falta de poco más de una semana para el cierre del mercado estival, el Real Zaragoza todavía tiene varios frentes abiertos. Lalo Arantegui necesita deshacerse del lastre que suponen los contratos en vigor de varios jugadores de la primera plantilla. Son los casos de Irureta, Barrera, Bedia y Xumetra, que tras un verano donde sólo el último ha disputado algún partido de pretemporada, deben encontrar un destino si quieren disputar algún partido oficial esta temporada.

Los elevados emolumentos que perciben dificultan sus desvinculaciones, mientras que otros equipos no están dispuestos a alcanzar las pretensiones salariales de estos jugadores. Los cuatro llegaron la temporada pasada de la mano de Narcís Juliá (Bedia en invierno) y son de las fichas más elevadas de la plantilla, algo que no se corresponde con sus rendimientos en el curso pasado.
Irureta apenas despierta interés en los equipos de Segunda División tras una temporada en la que sus fallos han sido los protagonistas en la práctica totalidad de jornadas. El meta vasco no contempla salir al extranjero, por lo que la rescisión de contrato parece el resultado más lógico. Caso similiar es el de Barrera, que tras un año en el que apenas tuvo minutos debido a su pobre rendimiento, no encuentra un destino en la categoría de plata.
Quienes más cerca están de salir son Xumetra y Edu Bedia. Ambos cuentan con el interés de varios equipos de Segunda, si bien todavía no hay una oferta firme por ellos. Como en el caso del ya rescindido Lanzarote, también cuentan con propuestas de equipos punteros de Segunda B, además de ofertas de otras latitudes, que contemplan con recelo a pesar de la elevada ficha que percibirían. Aún así, el Real Zaragoza deberá pagar parte de sus fichas si quiere conseguir unas desvinculaciones que aliviarían la masa salarial de cara a las nuevos refuerzos con las que se pretende cerrar la plantilla.