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Es Noticia

Laterales sin dueño

Daniel Marzo

El Real Zaragoza ha arrastrado numerosos problemas a lo largo de la temporada, tantos como para no tener ni tan siquiera atada la permanencia a dos jornadas para el final de la campaña. Uno de los problemas más llamativos del equipo ha sido la falta de consistencia de sus laterales, que ha obligado a los diferentes entrenadores del equipo a buscar distintas soluciones.

Parece evidente que una de las mayores rémoras del equipo aragonés en esta 2016-17 ha sido la ausencia de solidez defensiva. Una cuestión que se agudiza en la portería, en la que han pasado hasta tres jugadores sin la regularidad suficiente como para hacerse con un puesto fijo, así como en los laterales, en los que el baile de nombres ha sido constante.
Y es que el Real Zaragoza es un equipo con cinco laterales en plantilla, pero en cuya alineación titular aparece un central ocupando el sector izquierdo de la zaga. Sirva esto como ejemplo de los problemas que ha venido arrastrando el equipo en esta zona concreta del campo. Ya con Luis Milla a los mandos las dudas comenzaron a aflorar, en la derecha por las similares características de Fran e Isaac, a los que alternaba indistintamente y en la izquierda, por la falta de nivel de Casado. Con Raúl Agné, Isaac pasó al ostracismo, José Enrique se adueñó de la izquierda y se fichó a Feltscher para tratar de dar consistencia a ambas posiciones.
Pero ninguna de las soluciones ha sido suficientemente convincente como para alcanzar el éxito. Láinez dio un nuevo giro a los laterales con la vuelta de Isaac y el cambio de posiciones de Cabrera y José Enrique. Soluciones transitorias que tampoco han acabado de convencer a la vista de los resultados. Una situación a la que se le suma la presencia puntual de Zapater o Bagnack en una posición que se ha mostrado maldita en esta temporada para el Real Zaragoza y que obliga a una profunda reflexión para la dirección deportiva de cara a la próxima campaña.

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