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Un boquete atrás

Juan Viladés

El Real Zaragoza es el segundo equipo más goleado de la Segunda División. La endeblez de línea defensiva y de su portería está siendo un lastre demasiado pesado para un equipo que tampoco destaca por su capacidad anotadora. Los blanquillos llevan encajados en 30 jornadas un total de 42 goles, lo que significa que la meta de Ratón, Irureta o Saja recibe casi un gol y medio por partido.

Sólo el Mirandés, actual colista de la categoría de plata, tiene peores números que el equipo ahora entrenado por Láinez. Los burgaleses suman 48 goles en contra, lo que les ha convertido en el principal candidato al descenso a 2ªB. Este hecho da buena muestra de la importancia que tiene mantener la puerta a cero para ocupar un puesto en la zona noble de la clasificación. El Levante, líder incontestable de esta categoría, es también el equipo menos goleado con tan sólo 20 tantos en contra. Su portero titular, Raúl, ha dejado la puerta imbatida en 14 de los 25 partidos que ha disputado.
Una situación totalmente contraria a la que viven los porteros del Real Zaragoza. Entre los tres hombres que han ocupado la portería blanquilla, solo han sido capaces de mantenerla intacta en 6 ocasiones. Irureta, que ha disputado 17 encuentros, ha dejado la puerta a cero en 3 ocasiones, mientras que ha recibido 25 tantos. Ratón es el segundo clasificado en esta comparativa. El meta gallego ha dejado la portería imbatida en 2 de los 8 partidos que ha disputado. Por su parte, Saja, el último en llegar, solo ha sido capaz de dejar la puerta a cero ante el Numancia.
Si el Real Zaragoza no quiere pasar todavía más apuros, deberá mejorar su faceta defensiva. Y qué mejor que un exportero como César Láinez en las labores de entrenador para tomar conciencia de la importancia que tiene no encajar más goles.

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