Luis Milla: "La directiva fue demasiado exigente e impaciente"

El exentrenador del Real Zaragoza, Luis Milla, ofreció una charla a través de Instagram en la que analizó su salida del club blanquillo, así como otros aspectos relacionados con su carrera como técnico. El turolense, que se mostró cordial y distendido durante toda la comparecencia, no escatimó en elogios hacia su antigua plantilla y mostró su deseo de ver al Zaragoza en Primera división.

 
Pasados casi dos meses de su despido del Real Zaragoza, el técnico apuntaba los motivos que cree que causaron su salida: "Los gerentes del club pusieron unas exigencias demasiado altas, yo no las entendía teniendo en cuenta la situación de la entidad. La impaciencia de los gerentes con los resultados de mi proyecto pienso que fue definitiva para mi salida". Del mismo modo Milla reconocía que pudo "no estar a la altura en determinados momentos", pero entendía "la presión que un club como el Zaragoza tiene en Segunda".
La plantilla de la que dispuso fue otro de los temas que abordaba el preparador turolense. "La plantilla en general era muy buena, había muy buen grupo y jugadores de mucha calidad, pero era corta", admite. Además, declaraba que la baja de Cani les afectó demasiado: "Cani es un hombre de mucha calidad y experiencia; un líder. Su lesión nos privó de mucha capacidad de dar pases filtrados y visión de juego". Sobre el papel de Bagnack y Popa en la plantilla, el extécnico zaragocista afirmaba que "son jugadores que llegaron para sumar, jóvenes y que tienen que mejorar". Sobre el rumano añadía: "Popa ha tenido problemas de adaptación, venir con 19 años a otro país, dejar tu familia... Todo eso es difícil, y además no ha logrado adaptarse del todo al fútbol español, pero la temporada es larga y estoy seguro de que tendrá su oportunidad".
Uno de los aspectos por los que Milla fue más criticado fue su carácter conservador en las alineaciones. A pesar de la mala racha que atravesaba el equipo, apenas realizó cambios significativos en su once inicial, algo que achaca a la confianza que tenía en sus jugadores: "No realizaba cambios ya que entendía que teníamos un gran once "tipo", pero nos faltaba algo de plantilla. Entendí que tenía que darles confianza y continuidad". Además, el turolense justificó la escasa presencia de Edu García y los canteranos en sus alineaciones: "Con Edu García no tuve muchas oportunidades para ponerlo, faltó tiempo ya que fue uno de los últimos en llegar, mientras que la cantera es algo delicado y hay que darles entrada en el momento oportuno, la presión es muy grande para ellos a pesar de que están haciendo un temporadón en tercera".
Para finalizar Luis Milla afirmó que no tiene intención de entrenar en el extranjero (por ley ya no puede entrenar esta temporada en España) aunque "nunca se sabe". "Mi intención es volver a entrenar el año que viene en España, por eso sigo estando lo más cerca que puedo del fútbol", respondía ante las preguntas de sus seguidores. No quiso despedirse sin olvidarse de la afición blanquilla, a la que agradecía "todo el apoyo y trato prestado" y deseó la vuelta del equipo a Primera División: "Estoy seguro de que el Zaragoza quedará entre los seis primeros. La afición y el ambiente en La Romareda es espectacular y se merece ver a su equipo en lo más alto, pero tienen que entender que los pitos no ayudan al equipo".