El confinamiento del exportero vallisoletano Javier Falagán en China
Javier Falagán, portero vallisoletano que llegó a jugar en LaLiga Santander durante la década de los 90 con equipos como la Sociedad Deportiva Compostela (más de 60 encuentros como titular), atendió a Radio Marca para hablar de cómo está viviendo el confinamiento, en su caso cuarentena, desde China. El exguardameta, actualmente entrenador de porteros del Guangzhou, habló sobre la situación de crisis social que atraviesa el mundo debido al coronavirus.
Falagán comentó como fue su regreso a China tras su alojamiento en España: "En el aeropuerto pasamos distintos controles y, después, una ambulancia del Gobierno chino nos trasladó a un hospital cercano. Desde ahí fuimos a nuestra ciudad deportiva, donde guardamos la cuarentena durante 14 días. Una vez pasada esa cuarentena, hemos podido empezar a entrenar con nuestros equipos".
Sobre ese regreso a los entrenamientos, aseguró que "ahora ya entrenamos con total normalidad, pero una vez que acaba el entrenamiento nos tenemos que poner las mascarillas para andar por el edificio". Del mismo modo, confirmó también que "en China las cosas van volviendo paulatinamente a la normalidad".
"En España hay muchas denuncias de gente que se salta el confinamiento y esto puede provocar que lleve más tiempo superarlo".
Habló también sobre las similitudes y diferencias entre España y China a la hora de tomar medidas: "Aquí, una vez que se hizo pública la epidemia, lo primero que se hizo fue confinar a la población de Wuhan. Además, el gobierno ha destinado ingentes cantidades de dinero y de mano de obra".
También cuestionó la actitud de los ciudadanos durante el periodo de cuarentena: "Los ciudadanos chinos son más disciplinados que los europeos. En España hay muchas denuncias de gente que se salta el confinamiento, lo cual pone en peligro a otras personas y esto puede provocar que lleve más tiempo superarlo".
Posible regreso de la competición
Sobre la reanudación de la competición en Europa, Javier Falagán se mostró escéptico: "Puede resultar creíble si hablamos de junio. Tras un parón de dos meses y medio, por mucho acondicionamiento físico que los preparadores hayan hecho, el futbolista en este tiempo no está en contacto con el balón, no esprinta...".
Hizo hincapié también en la necesidad de un periodo de reacondicionamento físico, con el objetivo de que "no haya una gran cantidad de lesiones".
Sobre su pasado blanquivioleta, habló de una 'espina clavada': "Para mí era muy ilusionante jugar en el equipo de mi ciudad. Cuando hubo overbooking en el filial, decidí salir al RC Celta de Vigo, donde empecé a hacer mi carrera. Pero a mí, personalmente, me queda la espina de no haber jugado en Primera con el equipo de mi ciudad".