La racha de Sergio, a prueba en un Montilivi en horas bajas

El Girona FC y el Real Valladolid abrirán la Liga Santander 2018/2019 y en el Estadio de Montilivi chocarán dos rachas que podrán decantar el partido. Por un lado, los locales finalizaron la campaña pasada con cuatro derrotas consecutivas en su feudo, algo que deberán revertir desde la primera jornada para volver a completar una gran campaña en la élite; mientras que los blanquivioleta, de la mano de Sergio González, consumaron el ascenso mostrándose muy fiables a domicilio con un balance de cinco triunfos y una única derrota.

Con el fin de empezar de la mejor manera posible, los vallisoletanos deberán vencer en un estadio en el que no han ganado nunca. Sin embargo, si Sergio González y sus pupilos son capaces de dar continuidad a la dinámica ganadora que insufló el técnico catalán la campaña pasada, vencer en Montilivi se erige como una empresa más factible. Desde la destitución de Luis César Sampedro, el Real Valladolid viró su rumbo a domicilio y los números cosechados son el mejor aval posible: cinco triunfos, incluyendo dos en play off en el Estadio de El Molinón - Enrique Castro 'Quini' gijonés y en el Nuevo Estadio de Los Pajaritos soriano; y una sola derrota en el Estadio de La Romareda maño. Lejos del Nuevo Estadio José Zorrilla, el Pucela de Sergio voló hasta Primera División.

En la élite del balompié español se encontraba ya el Girona de un Pablo Machín que abandonó el banquillo gerundense después de una ilusionante temporada en la que los suyos finalizaron décimos después de haber coqueteado incluso con los puestos europeos. En Montilivi, no obstante, se ha llevado a cabo una dulce transición que buscará reeditar dicho éxito que se vio empañado por las cuatro derrotas consecutivas con las que despidieron LaLiga 2017/2018. Una racha que deberán revertir Eusebio Sacristán y Onésimo Sánchez ante "su" Real Valladolid a las primeras de cambio.