Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada (recopilan datos sobre tus gustos y perfil).

Si continúas navegando por el sitio, estás aceptando su uso.

Puedes rechazar la utilización de cookies u obtener más información al respecto en nuestra Política de Cookies

A través de cualquiera de las páginas webs del Grupo tiene la opción de personalizar las cookies tal y como desee.

Es Noticia

Obligación de revancha

ElDesmarque

Dicen que lo bueno de las segundas vueltas en el fútbol es que te puedes cobrar las revanchas que te quedaron pendientes en el pasado y, obviamente, el Real Valladolid se enfrenta ahora a una de las grandes batallas que le han quedado pendientes de la primera mitad de la temporada. Lo vivido en el Nuevo Estadio José Zorrilla el 5 de noviembre dejó una huella muy importante en el vestuario de Luis César SampedroLa dura derrota (0-3) ante el Club Gimnàstic de Tarragona supuso un mazazo importante para la confianza, la mentalidad y la fortaleza de un equipo que, ahí, comenzó su peor fase de la temporada.

 
La visita del equipo catalán enfrentaba en la decimoquinta jornada a un Real Valladolid que vivía en la novena plaza, a sólo dos puntos del play off, con un conjunto lleno de dudas y sólo un puesto por encima del descenso. En un partido muy especial para Luis César, por enfrentarse al que fue su equipo y por llegar a los 400 partidos en LaLiga 1|2|3, la visita tarraconense era especial pero terminó siendo trágica.
Tres goles encajados por Jordi Masip y la pobre actuación global hicieron saltar todas las alarmas. El Pucela sufría el primer gran revés de la campaña como local y Luis César obligaba a la reflexión. Individual y grupal. Era el momento de analizar qué había pasado y por qué. Su rueda de prensa posterior fue muy crítica con lo vivido. Obviamente, nada le había gustado y era uno de esos momentos en los que un entrenador duda de todo y de todos.

Sed de revancha

Sampedro se cuestióno mucho todo tras aquel partido y en el vestuario, como siempre ocurre en el fútbol, se apuntó una fecha. Los blanquivioleta marcaron en rojo el duelo del Nou Estadi de Tarragona. En él, este domingo y desde las 12.00 horas, el Real Valladolid y el Nástic de Tarragona se volverán a ver las caras o, lo que es lo mismo, el Pucela buscará la revancha sobre el conjunto que más carencias, limitaciones y problemas ha mostrado del equipo pucelano en el propio feudo blanquivioleta.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar