Primera gran revolución

Pese a la mala racha que pudiera tener el Real Valladolid, Luis César Sampedro no había cambiado mucho su once titular. Había mantenido siempre un equilibrio sobre su idea y nunca ha roto con ella. Muy pocos han sido los cambios que había realizado, hasta el duelo de este sábado en el Estadio Carlos Belmonte. En este duelo de elevada importancia, el míster gallego sorprendía con muchos de los detalles del once. Ya fuera tanto el esquema como muchos de los nombres propios que lo conformaban y que no.

 
La principal novedad del once titular estaba en la incursión de Javi Moyano y la consiguiente ausencia de Nacho Martínez. El carril del '3' era para el lateral jienense que se unía a Antoñito Regal y a la novedosa pareja de centrales formada por Fernando Calero y Deivid Rodríguez. Tras ellos, y después de la presencia inamovible de Jordi Masip, aparecía un novedoso centro del campo. No tanto por la idea y sí por sus nombres. Sobre el papel, la idea era similar a la inicial ante el Club Deportivo Numancia pero sólo repetía Anuar Tuhami. Si bien Alberto Guitián no viajaba, Antonio Cotán era el jugador descartado del once titular.

Cinco cambios

El '16' se quedaba fuera del once titular para hacer hueco a Borja Fernández y Luismi Sánchez. Ambos, sancionados ante el equipo de Jagoba Arrasate, regresaban al once titular para formar con una línea de tres centrocampistas. Tras ellos, y acompañando a Jaime Mata, fijo para Sampedro desde la segunda jornada, aparecían Ibán Salvador, que repetía del último duelo, y Óscar Plano, que sustituía a Toni Villa. En total, un mismo sistema del último duelo pero con cinco cambios sobre el once titular del último duelo.