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La base exblanquivioleta de este Rayo Vallecano

ElDesmarque

Hablar del Rayo Vallecano en el seno del Real Valladolid es hacerlo de Javi Guerra, que fuera delantero pucelano durante cuatro temporadas, Manucho Gonçalves, uno de los fichajes más caros de la historia pucelana, Patrick Ebert, un talento que no estuvo a la altura en su salida, y Johan Mojica, reciente exjugador de polémico final y controvertida etapa. Entre los cuatro, dejando un poco a un lado al colombiano, hacen la base del actual equipo rayista, un conjunto que no despega pese al cambio de entrenador y que se encuentra a solo dos puntos de la zona de descenso a Segunda División B.

 
En esa pelea, entre estos cuatro exfutbolistas vallsioletanos suman un total de 4.055 minutos, repartidos entre 62 partidos, con 45 titularidades. Este ha sido un tiempo en el que han firmado 11 goles y en el que han asistido en cinco ocasiones. Son jugadores de talento, como ya demostraron en sus respectivas etapas en el Nuevo Estadio José Zorrilla, pero con una ambición cuestionable para competir en Segunda División. LaLiga 1|2|3 no copa las exigencias de futbolistas con mentalidad de mayor éxito y que, como muchos de sus compañeros, no están al nivel de un equipo exigido a ascender y que su mejor momento de la temporada no ha pasado del octavo puesto.
La dinámica rayista no es buena. Rubén Baraja no está mejorando una planificación cuestionable que ha dejado la sorpresa de ver que Manucho es el jugador de la plantilla con más partidos disputados de la temporada. Ya sea como titular o como suplente, el angoleño siempre salta al terreno de juego. Estas oportunidades no le llevan a encontrarse con el gol. El ex del Manchester United ha conseguido tres tantos, dos de ellos ligueros, mientras que Ebert y Javi Guerra son los máximos anotadores de este proyecto con cuatro tantos, cifra muy pobre y que marca las limitaciones de este equipo.

Un cuarteto cerca de romperse

Mientras Javi Guerra y Patrick Ebert ostentan ser los hombres con más goles y Manucho, el más soliticado por el cuerpo técnico, Mojica no puede celebrar ni alardear de nada. El extremo colombiano es uno de los jugadores menos utilizados por el Rayo Vallecano, lo que le hace estar a un paso de su salida. El que fuera jugador blanquivioleta en las dos últimas temporadas puede estar viviendo sus últimos días en el equipo madrileño en la previa a visitar el que fue su estadio, el terreno de una afición que, salvo en el caso del delantero malagueño, que siempre convenció con sus goles, todos consiguieron ganarse en algunas fechas, pero en la que han dejado más recuerdos negativos que positivos. Por algo están en esta edición del Rayo Vallecano, un equipo irregular, como fueron todos de blanquivioleta, y sin rumbo definido.

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