El Norte de Castilla se hace eco en su edición impresa de este martes 9 de enero de la última memoria económica publicada por el Real Valladolid. En ella se refleja la imperiosa necesidad de ascender a Primera División antes de la temporada 2021-2022. En el caso contrario, el club no podría afrontar el plan de pagos del convenio firmado con la Agencia Tributaria y se vería abocado a la disolución. Otro de los requisitos para evitar la desaparición es no descender a Segunda División B.
El calendario de pagos, diferente según la categoría en la que compite el club, obliga al Real Valladolid a abonar esta temporada 182.167,79 euros mensuales. Durante la presente campaña, tendría que pagar 1,8 millones a Hacienda. Pero, según informa El Norte, el límite para pagar los 29 millones de deuda total es la temporada 2021-2022. Hasta la 2020-2021 no hay incremento en las cuotas, pero sí en los intereses. Además, Hacienda se lleva el 25% de cada traspaso. En el caso de no ascender antes de 2021, la siguiente temporada (2021-2022) el club tendría que pagar 16,1 millones de euros a la Agencia Tributaria y 2,5 millones a Hacienda en concepto de intereses. Cifras aparentemente inviables en la Liga Adelante.
En su información, El Norte también apunta que, según la citada memoria, el despido de Rubi y su cuerpo técnico costó 205.000 euros y que se deben 100.000 al Lens por el traspaso de Bergdich. Además, se refleja el limite salarial aprobado por la Liga para la actual temporada: 5,7 millones de euros con ingresos de más de 11 millones.