El peor momento de la carrera de Cervero: "La realidad nos puso en nuestro sitio"

Por méritos propios, Diego Cervero es el ídolo moderno del Real Oviedo. Con sus goles, guió al equipo carbayón en sus años más duros, tanto en Tercera como en Segunda división B.

Ahora en el Atlético Sanluqueño gaditano, en el que comparte delantera con Dani Güiza y Álex Geijo, apura sus últimos años de carrera. En una entrevista concedida al Diario MARCA, el Doctor ha repasado los altos y bajos de sus veinte años en el fútbol.

Como no podría ser de otra forma, Cervero considera que uno de los mejores momentos de su carrera fue "ese gol con el Oviedo al Cádiz" que les devolvió al fútbol profesional. "Nunca había soñado con llegar tan alto", añade.

Su peor momento también ocurrió cuando vestía la elástica azulona. El fallecimiento en un accidente de coche de su compañero Armando Barbón en noviembre de 2003, con tan solo 19 años. "El fútbol va y viene, pero la vida solo va, no viene. Le recordaremos siempre", concluye.

Aunque en el aspecto deportivo, sus momentos más complicados fueron los no ascensos ante el Atlético Arteixo en 2004 y ante el Caravaca en 2008. "La realidad nos puso en su sitio. Fueron buenos aprendizajes", admite.

El día que Cervero pensó en la retirada

Aunque actualmente se encuentra en un buen momento, hace poco más de un año Diego Cervero llegó a pensar en la retirada. "Si no me hubiera llamado el Atlético Baleares el 30 de agosto, el fútbol me hubiera dejado. Me apunté a la academia del MIR y no me llamó ningún club", afirma.

Ahora, encara la última temporada de la Segunda B con esta denominación en una categoría de la que es uno de los máximos goleadores históricos. Un jugador que, en sus propias palabras "siento que quedaré en la historia de la Segunda B".