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Objetivo: recuperar la fortaleza defensiva

Zozulia protagoniza una acción ante Champagne en el Albacete-Oviedo (Foto: LaLiga).

El Real Oviedo es, desde la llegada de Javi Rozada, el equipo más goleador de la categoría con 12 goles en siete partidos. El potencial ofensivo del conjunto carbayón queda fuera de toda duda con Ortuño como máximo exponente con nueve goles. La debilidad del equipo vuelve a estar, otro año más, en la defensa y en los goles recibidos.

La cifra de goles en contra asciende a 19 en 12 jornadas, lo que es más de gol y medio por partido. Hasta la jornada cinco, el Oviedo recibía una media de dos goles por partido. En las últimas siete jornadas el cuadro azul ha encajado nueve goles. Es más de un gol por partido, pero el ratio se ha reducido casi a la mitad.

El Oviedo de la temporada 2019/2020 es un equipo de contrastes, con la mejor plantilla del centro del campo para delante en años, pero con una línea defensiva que no se ha reforzado tanto. Por la lesión de Alejandro Arribas, y la suplencia de Javi Fernández, son jugadores titulares Carlos Hernández y Christian Fernández.

Otro hándicap con Rozada, pero extrapolable al equipo en los 12 partidos de curso, es la incapacidad para dejar la portería a cero. Solamente en una ocasión el rival se quedó sin anotar, fue en el Heliodoro Rodríguez López, en la primera victoria de la temporada contra el Tenerife. En rueda de prensa, el preparador ovetense ha afirmado que para él lo más importante es marcar siempre, y a partir de ese momento intentar minimizar al máximo las ocasiones del rival.

Con todo ello, el Oviedo ha salido de la mala dinámica que le había arrastrado hasta el colista. Se encuentra un punto por encima del descenso, y de no ganar en Málaga podría terminar la jornada en posiciones de descenso. Pero al margen del resultado del partido del sábado, el equipo vuelve a competir y prueba de ello es que lleva cinco partidos sin perder.

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