El Oviedo encuentra el camino
El Real Oviedo parece haber encontrado en este arranque de 2019 la línea regular tan buscada a lo largo de toda la temporada. Seguir el camino recto es una de las recetas para que las cosas vayan bien en una categoría tan igualada y caótica como la Segunda división, sobre todo de cara al apartado clasificatorio. Más allá de las tres victorias consecutivas y de los cuatro partidos sin perder, el Oviedo parece haber encontrado el camino en cuanto a la idea de juego y en cuanto a la solidez defensiva, dos aspectos que se venían persiguiendo con insistencia durante la primera parte de la campaña.
El Oviedo de los dos últimos partidos, posiblemente sin ser el más brillante, es el que más se acerca a lo que se ha ido buscando con el paso de las jornadas. La apuesta por el 4-3-3 inicial fue virando hacia el dibujo de los tres centrales y los dos carrileros, que no acabó de dar las sensaciones óptimas hasta ahora. Cerrar atrás, transiciones rápidas y llegadas por banda. Son tres señas de identidad del dibujo y repetidas hasta la saciedad por Anquela en el trabajo táctico entre semana.
La mejor expresión de esas claves la dio el Real Oviedo ante el Extremadura en el Francisco de la Hera. También contra el Tenerife en el Carlos Tartiere una semana antes e incluso contra el Málaga en el último partido de 2018. En los cuatro últimos partidos, el Real Oviedo ha dejado la portería a cero en tres. Además, en esos tres, sin apenas sufrir ocasiones por parte de los equipos rivales. La zaga parece haberse asentado, coincidiendo con la vuelta de Carlos Hernández a la misma.
La figura de Bárcenas también está siendo clave, siendo el jugador que partiendo desde la zona de tres cuartos lidera el juego ofensivo. Lleva el juego de un lado a otro, hacia las subidas de los carrileros y aporta en goles y asistencias, siendo a estas alturas el máximo goleador de los carbayones con cinco tantos. Fueron constantes en Almendralejo las llegadas por los laterales. Las ocasiones más claras, a parte del segundo gol llegaron con claro protagonismo de Mossa y Carlos Martínez.
Ese envoltorio hace que el último partido pase por ser uno de los más redondos de la temporada, enmarcado además en el mejor momento de los azules, que parecen haber encontrado la comodidad en el juego. Pero en una categoría como esta, no hay espacio para el despiste ni para la relajación y en el horizonte más cercano está el mantener todas esas sensaciones.