Mirar hacia arriba
El Real Oviedo recibe este sábado a partir de las 20:30 en el Carlos Tartiere al CD Tenerife, en busca de convertir la victoria contra el Numancia en un punto de inflexión. Los azules quieren arrancar 2019 con buen pie, sumando los seis primeros puntos, algo que haría olvidar el mal sabor de boca de finales de 2018 y que la situación clasificatoria se viera aliviada. El partido de Soria se quiere convertir en un punto de cambio y eso lo marcarán los próximos resultados, empezando por este encuentro contra el Tenerife.
El gol de Christian en el minuto 90 ante el Numancia cambió la lectura de un punto que iba a traer otra semana de frustración. Las conclusiones fueron entonces más amables, sobre todo teniendo en cuenta que el próximo partido es en el Carlos Tartiere. La situación clasificatoria del Tenerife invita al optimismo, aunque sin descuidar los vaivenes de una categoría imprevisible. Sumar seis puntos consecutivos harían recortar distancia con el play off, justo antes de comenzar la segunda vuelta.
El Tartiere se ve como arma, pero en el recuerdo cercano quedan los dos tropiezos del mes de diciembre. Una derrota contra el Almería y un empate ante el Málaga; resultados que se quieren olvidar con otro propósito de 2019, como es ganar nuevamente en casa.
Para buscar este resultado, Anquela no plantea muchos cambios. Acostumbrado a mantener la idea; la victoria de Soria da más fuerza a esa tesis del técnico. Se repite convocatoria y podría repetirse once, aunque un Joselu cada vez más en forma podría adelantar a Toché en la delantera. El resto, sin descuidar a Mossa en el carril izquierdo, podrían ser los mismos, a la espera de la llegada de Saúl Berjón.
El Tenerife llega con la necesidad de puntos para seguir escapando de la zona baja. Es uno de los equipos que más está sacudiendo el mercado, pero de todas esas incorporaciones ninguna estará lista todavía para el Carlos Tartiere. Tampoco estará uno de sus hombres importantes, como Suso Santana, es baja por acumulación de cartulinas amarillas.
El primer partido de 2019 en el Carlos Tartiere llega con la ilusión de volver a ver una victoria local, y que además sirva para establecer una línea de regularidad abandonada desde hace varios resultados. Una inercia que permita a los azules ir disminuyendo la distancia con los puestos de arriba y volver a acercarse al play off.