El Oviedo coge carrerilla
El Real Oviedo buscaba convertir el resultado ante el Numancia en un punto de inflexión y eso pasaba por el partido de este sábado en primera instancia. La inercia es positiva en el arranque de 2019 con seis puntos de seis posibles. El Tartiere volvió a ver una victoria local después de dos tropiezos y eso que un nuevo contratiempo sacudió los planes de Juan Antonio Anquela en el calentamiento. Viti no pudo participar finalmente y en su lugar entró Omar Ramos.
El Oviedo comenzó mandando en el partido y siendo mejor que el Tenerife. Omar Ramos se mostraba muy activo y demostraba, algo que ya hizo en Soria, tener buen toque para el balón parado. La primera ocasión clara fue para él. Recibió un balón en la frontal con espacio y sacó el disparo con su pierna derecha. El balón se envenenó al rebotar en un contrario y acabó siendo repelido por el larguero.
El Oviedo rondaba constantemente el área del Tenerife, con los hombres ofensivos muy activos. El gol llegó en el minuto 23. Yoel Bárcenas cazó un balón suelto a unos 30 metros y sacudió con empeine total. La pelota entró por la escuadra de la portería de Dani Hernández, poniendo al Oviedo por delante.
A partir de ahí la posesión pasó a ser visitante y los contratiempos siguieron sacudiendo los planes azules. Omar Ramos, que estaba siendo uno de los mejores, tuvo que retirarse también lesionado en el minuto 30, teniendo que entrar Mossa en su lugar y pasando Bárcenas a la derecha. Los tinerfeños iban creciendo en el partido y tuvieron el empate cerca en el minuto 40. Malbasic llegó a linea de fondo cayendo a banda derecha y el pase de la muerte al área pequeña lo remató Montañés con todo a favor, pero se marchó desviado. Los azules pedían a voces el descanso. Champagne tuvo que rechazar un disparo de Malbasic en el 44 y finalmente el intermedio llegó con el 1-0.
El descanso sentó bien a los azules. El aluvión visitante se frenó y el Oviedo tuvo dos claras ocasiones en los primeros minutos. La primera en el balón parado, nuevamente en la cabeza de Carlos Hernández, pero el remate se marchó alto. Posteriormente Javi Hernández llegó por su costado y disparó hasta en dos ocasiones, pero Dani Hernández tenía bien tapado el primer palo.
Tras este fuerte arranque, el encuentro fue perdiendo intensidad, con el Oviedo dando síntomas de sentirse cómodo sobre el terreno de juego. En el balón parado pudieron sentenciar los carbayones en el minuto 80. Una falta lateral botada por Tejera la peinó Christian y un defensa evitó el gol cuando el balón iba hacia portería con Dani Hernández batido. Diegui tuvo la última en el descuento, pero Dani Hernández rechazó con una gran intervención.
El Tenerife no inquietó en exceso y el Oviedo supo partido supo jugar los minutos finales, incluidos los cinco de descuento. Con el pitido final llegó la alegría de sumar dos victorias consecutivas y de ver como esos resultados acercan a los azules a la parte alta de la tabla.