Las causas del enfado del Real Oviedo con los árbitros

El Real Oviedo está intentando olvidar la derrota sufrida en Lugo para poder despejar la mente y trabajar para llegar en las mejores condiciones al encuentro ante el Huesca. Los azules no pudieron llevarse un punto por un gol anulado por fuera de juego, que sí era legal, y el equipo se quejó de la actitud arbitral ante los medios -algo que es novedad esta temporada-.

Fernando Hierro siempre ha tratado a los árbitros como un elemento externo que no puede ser el dueño del protagonismo en un encuentro de fútbol donde los 22 que visten de corto son los que celebran los goles y lamenten las ocasiones desaprovechadas. Este fue el discurso habitual de toda la temporada, hasta la rueda de prensa posterior a la derrota en Lugo.
"No suelo hablar del árbitro, pero hay cosas que no me gustan", afirmaba Hierro en la sala de prensa. A pesar de la insistencia de los medios allí presentes el técnico no quiso entrar en detalles pero sí dejo el recado. Está cansado de ciertas actitudes y decisiones.
En zona mixta Toché y Susaeta no fueron capaces de tener esos nervios de acero y sí dieron más detalles. "nos han quitado otra vez. No nos sobra nada. Van dos desplazamientos en los que ocurre. Hemos metido un gol legal, que nos han restado, no me gusta que nos resten los árbitros porque no nos sobra", comentó Susaeta. El ariete azul siguió en la línea del vasco y afirmó que los árbitros "son humanos, pero últimamente nos están quitando". 
El Real Oviedo es un equipo que fuera de casa no realiza grandes partidos, pero que los árbitros tomen parte negativamente no ayuda. En Tenerife el colegiado señaló un penalti inexistente, algo que ocurrió también ante el Real Zaragoza hace meses.
En Lugo los azules fueron testigos de cómo el arbitro anulaba un gol legal, el 2-2, y caían derrotados ante el conjunto gallego. Tampoco es el primer gol legal que anulan a los azules, ya que en el Carlos Tartiere ha ocurrido en varias ocasiones.
Además tarjetas amarillas como la que vio Miguel Linares desde el banquillo en la lesión de Varela por pedirle al árbitro que parase el partido ante los claros gestos de dolor de su compañero, incrementan ese malestar. La chulería de los colegiados no gusta.
Por si fuera poco el conjunto azul es el segundo equipo de la categoría de plata del fútbol español al que menos penaltis le pitan. Los azules solo han lanzado dos durante toda la temporada. No necesariamente porque los árbitros estén siendo injustos en ese sentido, pero es un hecho que sumado a todo lo anterior genera cierta molestia.
El Real Oviedo no ha querido entrar a explicar a qué se refería Hierro exactamente pero los motivos explicados arriba serán, probablemente, los mismos que el técnico tiene en su cabeza y que molestan también a la afición,