Zidane: un once titular claro... y 400 millones en el banquillo

Zinedine Zidane parece haber encontrado su once titular. Una alineación de confianza que le ha servido para reconducir la situación del Real Madrid, que hace apenas un mes estaba en una situación crítica que provocó que se hablara de la destitución del francés. Los que están en mejor forma salen de inicio y el resto, se quedan en el banquillo. Un banquillo que ha costado nada menos que 400 millones de euros en fichajes a Florentino Pérez.

El pasado miércoles, Zidane tuvo 12 jugadores sentados en la grada de Valdebebas esperando su turno. Sólo entraron dos, pues el técnico se ha acostumbrado a hacer pocas sustituciones, y una de ellas fue de manera obligada por la lesión de Rodrygo Goes. Entre los que se quedaron sin jugar destaca la presencia de Eden Hazard, cuyo fichaje costó 100 millones fijos más otros 30 en variables, aunque hay medios que elevan esas cifras a los 160 'kilos'.

Los 400 millones del banquillo de Zidane

Por orden, esos 130 millones de Hazard sitúan al belga como el jugador más caro del banquillo de Zidane. Le sigue Luka Jovic, que costó 63 millones y tampoco está teniendo demasiadas oportunidades, más allá de un par de titularidades a principio de curso. En tercer lugar de manera sorprendente, está un Eder Militao que parece condenado al ostracismo tras el pago de 50 millones por su fichaje.

Vinícius costó 45 millones y tampoco vive su mejor momento. Las llegadas de Isco Alarcón y Álvaro Odriozola tuvieron un coste de 30 'kilos' cada uno, aunque el malagueño, que sí llegó a jugar ante el Granada, está más que amortizado. La cifra de Mariano Díaz se va a los 21,5 millones en una operación polémica con el Sevilla de por medio para otro jugador acostumbrado al banquillo, salvo casos excepcionales.

Siete jugadores cuyo coste total se eleva casi a los 370 millones de euros y a los que hay que añadir otros cuatro que llegaron a precio de ganga. Marco Asensio sólo costó 3,5 millones y Marcelo, apenas 6,5 'kilos', dos llegadas más que amortizadas. La de Odegaard lo alcanzó los 3 millones, mientras que el precio de Lunin, de 8,5 millones, aún está por amortizar. A ellos se une un Nacho Fernández de la cantera que completan un banquillo de envidia y con un coste de casi 400 millones.