Lopetegui se juega su credibilidad bajo mínimos
El Real Madrid se enfrenta este martes al CSKA de Moscú en la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions League. A priori, debería ser uno de los partidos más asequibles para el cuadro de Julen Lopetegui. Al técnico le achacan en este inicio de campeonato que no ha sido capaz de responder en las grandes citas, aunque él se excusa recordando el partido ante la Roma. Porque en Champions, como suele ser tradicional, ese Real Madrid cambia su piel y se vuelve un equipo casi infranqueable.
Así ha sido tres años seguidos con Zidane. Ahora es Lopetegui quien toma el mando, con la presión que se le presupone al actual campeón. La afición ya ha empezado a mostrar algunas dudas sobre el técnico español, cuya credibilidad está en juego en cada partido. El primero, este próximo en Moscú. Un duelo en el que no podrá contar con cuatro de sus jugadores más habituales.
No tendrá a Marcelo, fijo en el costado zurdo. Y todo ello a pesar de que el brasileño ha mostrado un nivel muy bajo en este inicio de campaña. Su lesión abre la puerta a una nueva titularidad de Nacho o incluso a Reguilón, que podría debutar con Lopetegui. Tampoco estará Isco, operado hace apenas una semana de apendicitis y otro de los fijos de Julen. El Real Madrid pierde en creatividad y en magia y jugadores como Modric, Asensio o incluso Dani Ceballos deberán coger el timón.
A estas dos lesiones se han unido otras dos bajas de última hora. Gareth Bale se retiró lesionado en el derbi. A pesar de que el club asegura que no tiene ninguna lesión, el galés ni siquiera ha viajado a Moscú. Su buen inicio de temporada lo colocaba como sucesor de Cristiano Ronaldo, pero de momento se ha estancado y Lopetegui tampoco podrá contar con él. En una situación distinta, el técnico tampoco tendrá a su capitán, Sergio Ramos. En este caso, Julen ha decidido darle descanso y quitarle carga física, no sólo por el partido sino también por el viaje hasta Moscú.
Se trata, en definitiva, de cuatro bajas claves de jugadores que hasta ahora han sido fijos en el once. Julen Lopetegui tiene en juego su credibilidad y, aunque en principio el partido parece asequible, un nuevo tropiezo podría poner generar aún más dudas sobre su figura.