Gassama frena la asociación Embarba-De Tomás

Un tanto de penalti del senegalés Sekou Gassama a tres minutos del final anuló al RCD Espanyol, que empató (1-1) frente al Fuenlabrada y desperdició una ventaja propiciada por una mágica jugada de Adrián Embarba que ejecutó Raúl De Tomás.

El Espanyol sufrió un frenazo en su paseo triunfal por LaLiga SmartBank y en un penalti absurdo cometido por Diego López cuando el partido estaba finiquitado, se dejó dos puntos en el estadio Fernando Torres. Gassama no dejó pasar la ocasión e hizo justicia en en un marcador que tenía el nombre de Embarba y de Raúl De Tomás inscrito con letras de oro.

Pese al tropezón, el conjunto dirigido por Vicente Moreno se mantiene en el liderato de Segunda División con paso firme. Acudió a la cita del estadio Fernando Torres con 16 goles a favor y 2 en contra y con sólo una derrota, la que sufrió en Vallecas hace ya seis jornadas. Esas cifras no presagiaban nada bueno para el Fuenlabrada, que, sin embargo, logró un punto merecido.

En la primera parte, sólo Embarba fue capaz de romper el sistema de José Ramón Sandoval, que, desesperado, vio como el centrocampista del Espanyol se encargó, en apenas un fogonazo, de contrarrestar 45 minutos muy buenos del Fuenlabrada. Lo hizo en una jugada dentro del área, con un control exquisito, un regate de fútbol sala sobre Adrián Diéguez y una asistencia a Raúl De Tomás, que empujó a placer el 0-1 a los 25 minutos.

Hasta la aparición de Embarba, el Espanyol se dedicó a sobrevivir. No sabía lo que era disparar a la portería del serbio Dragan Rosic y se había salvado por los palos de ir perdiendo y por una acción del uruguayo Leandro Cabrera, que salvó debajo de su portería una opción de Franchu Feuillassier a los 20 segundos del inicio del choque.

Después, fue el senegalés Sekou Gassama quien se encontró con el larguero después de cabecear un gran centro desde la banda derecha de Álex Mula, que al filo del descanso lanzó una falta envenenada que Diego López despejó al larguero.

El Espanyol, excepto la acción de Embarba y una oportunidad del argentino Matías Vargas, no hizo mucho más antes del descanso. Y, después, apenas tuvo que mantener el orden para aprovecharse del desgaste de los jugadores del Fuenlabrada, incapaces de generar las mismas ocasiones que en la primera parte.

A excepción de una falta peligrosa lanzada por Mula y del ingenuo penalti cometido por Diego López por un derribo sobre Kanté, no hubo mucho más y Gassama aprovechó su oportunidad para hacer el empate con un zapatazo desde los once metros. Su gol hizo justicia en el marcador y el Espanyol tropezó cuando menos lo esperaba.