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El 'Mago' regresa en el momento adecuado

Melendo celebrando su gol ante el Ludogorets (Vía RCD Espanyol).

El RCD Espanyol recibía este jueves al Ludogorets búlgaro con la necesidad de cambiar las sensaciones ligueras y conseguir un resultado positivo que le dejase muy cerca del liderato final del grupo.

Por ello que desde el primer minuto se pudo ver a un equipo con hambre y con ganas de demostrar que el mal inicio de temporada está próximo a pasar a mejor vida. Un inicio fulgurante que dejaba 'contra la lona' al Ludogorets al descanso con un KO transformado en tres goles y dos cartulinas rojas que se harían insalvables.

Una vendaval entre el que sobresalía la figura de un hombre por encima del resto. Y es que para Óscar Melendo no se trataba de un partido más. El mediocentro contaba con una nueva oportunidad desde el inicio para demostrar que su rol debe cambiar para ayudar al equipo desde dentro del campo.

El '14' blanquiazul sólo necesitaría cuatro minutos para agarrar un esférico dentro del área y ponerla imposible para Iliev. Una diana de gran factura que celebraría con rabia acumulada y agarrando con fuerzas un escudo que siente desde muy pequeño.

Melendo, celebrando su gol ante el Ludogorets (Vía Espanyol).

Un soplo de energía que auparía al futbolista para volver a mostrar su mejor versión. Una buena imagen que llega en el mejor momento, cuando su equipo más le necesita.

Y es que Óscar Melendo está llamado a ser una pieza muy importante en los planes de Pablo Machín. Uno de esos jugadores que pueden cambiar una mala dinámica para convertirla en positiva. Una figura capaz de hacer olvidar todos los malos momentos para volver a encender la luz en el RCDE Stadium.

Su último truco en su reaparición fue una sutil y elegante asistencia para que Campuzano anotase el cuarto de la noche. Un destello que terminaría por levantar a los espectadores de sus asientos.

Los asistentes al feudo perico se pusieron en pie para despedirlo cuando Pablo Machín decidía sustituirle por Wu Lei.

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