La anécdota de la tarde: saltó un espontáneo y se hizo un 'selfie' con Munir

La anécdota de otra tarde para olvidar en La Rosaleda, sobre todo por su trágico desenlace, tuvo lugar en el ecuador de la segunda parte, justo cuando el asistente Pescador Hernández era retirado en camilla tras su desafortunada lesión. En ese momento de expectación y con el juego parado, un joven espontáneo saltó al césped de La Rosaleda con un único objetivo, hacerse una foto con Munir.

El espontáneo, móvil en mano, dejó atrás en la carrera al auxiliar de seguridad que le perseguía, que sufrió un inoportuno resbalón que dio tiempo al joven para su cometido. Munir se tomó la situación sin ningún tipo de estrés e incluso permitió que el aficionado se hiciera un 'selfie' junto a él para luego ser desalojado por los efectivos de seguridad (secuencia inferior).

Con el balón parado, (casi) todos los ojos y la energía estaban en la ovación el árbitro retirado en camilla, pero la anécdota no escapó de los ojos de algunos que aplaudieron lo que hay que interpretar como un gesto simpático y curioso. De cualquier modo, y en aras de que no se expanda la tónica en ese sentido, el Málaga puso un tuit que creó controversia, sobre todo por el empate postrero que dejó a todo el mundo enfadado.